El presidente del Barcelona, Sandro Rosell, decidió alejarse del cargo como consecuencia de las denuncias de supuestas irregularidades en la contratación del futbolista brasileño Neymar, estrella del equipo junto con Lionel Messi.

Rosell se había reunido más temprano con sus directivos más afines y luego del encuentro los medios catalanes dieron por confirmada la noticia de que presentará su dimisión.

El diario "La Vanguardia" había asegurado en su edición impresa que Rosell estaba meditando renunciar a su cargo después de que el miércoles la justicia admitiera a trámite una querella contra él por supuesta apropiación indebida y otras irregularidades en el fichaje de Neymar.

Rosell reunió con carácter de urgencia a los vicepresidentes Josep María Bartomeu y Javier Faus, además del director general Antoni Rossich y otros ejecutivos de su confianza.

El presidente tenía mandato hasta 2016, pero la denuncia presentada por un socio por el millonario pase de Neymar -que según una información publicada por el diario El Mundo costó 91 millones de euros en lugar de los 57 millones anunciados oficialmente- parece haberlo empujado fuera.