Le tirará por la cabeza el problema a los gobiernos de Macri en la Ciudad y Scioli en la provincia. Así, la sensación de desgobierno crece en Argentina
En medio de la crisis energática, y recluida en la frescura de El Calafate, la presidenta Cristina Fernández, o quien esté gobernando la Argentina en este momento, decidió sacarse el problema energético de encima y pasárselo a Daniel Scioli y Mauricio Macri.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, admitió que se analizan traspasar Edenor y Edesur a los gobiernos de Macri y Scioli, en una nueva inventiva política para sacarse la responsabilidad de encima.
Incluso, deslindó responsabilidad por parte del Gobierno nacional por los cortes masivo y culpó a las distribuidoras. Capitanich culpó a las empresas que “no se comunican con sus clientes” y defendió al ente de control (ENRE) al decir que su responsabilidad es aplicar las multas.
El chaqueño señaló que si las concesionarios “no están de acuerdo con la concesión, el Estado puede hacerse cargo del servicios”, pero dijo que por los cortes “no puede endilgarse la responsabilidad al Gobierno nacional”.
También insistió con que las empresas "Edesur y Edenor son las únicas responsables del servicio y deben ejecutar los planes de inversión correspondiente". "Los vecinos cuando no reciben el servicio, protestan con razón. Las empresas deben hacerse cargo e informar a sus clientes", dijo Capitanich.