Que cuatro amigos setentones vaya un fin de semana a las Vegas a vivir la vida loca, es una buena idea para una película, pero si a esos personajes se le pone el traje de cuatro estrellas de Hollywood, como Michael Douglas, Robert De Nuro, Morgan Freeman y Kevin Klaine, se está hablando de uan seleccionado que , en principio, garantiza un buen momento de cine.

La meca del cine reunió a cuatro de sus viejas estrellas para un film alocado. Se trata de Último viaje a Las Vegas (Last Vegas) para un cóctel de una divertida comedia desopilante.

La historia cuenta las aventuras de cuatro viejos amigos, todos jubilados en sus 70 años, dispuestos a celebrar la despedida de soltero de uno de ellos, quien finalmente quiere dar el “sí”. Bill (Douglas) era el único que seguía sin compromiso. Cuando decide casarse, sus amigos organizan la fiesta en el centro de todas las fiestas: Las Vegas.

La prometida es Diana (Mary Steenburgen), una cantante que, casualmente, empieza a tener una química especial con Bill. Pero otro de los amigos, Paddy (Robert De Niro), también se fijará en ella. Y allí, el conflicto.

Como si fuera un video de promoción turística con nombres de hoteles y espectáculos incluidos, la estadía en Las Vegas resultará divertida en sus excesos, con ineludibles golpes de suerte en las mesas de apuestas y apremio con el sexo opuesto de todas las edades.

Habrá revelaciones, disputas, lágrimas y reconciliaciones. Una comedia que divierte, donde hay mas oficio y tics que grandes actuaciones del poker de ases, pero alcanza como excusa ideal de la meca del cine para reunir a cuatro grandes nombres que han recibido premios y elogios de parte de la Academia.