La euforia de la morenista Beatriz Paglieri duró dos semanas. La secretaria de Comercio Exterior fue trasladada al cargo de segunda de la Aduana, por decisión del ministro de Economía, Axel Kicillof, quien ya había logrado desplazar a la titular del organismo, Siomara Ayerán, para reemplazarla por Carlos Sánchez, hombre de confianza del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.

Así, la alianza entre Axel y Coqui avanza sobre espacios clave del gobierno nacional.

Paglieri había sido nombrada como secretaria en diciembre de 2011, al inicio del segundo mandato de Cristina Kirchner.

Fue cuando el entonces todopoderoso Moreno puso en práctica las nefastas declaraciones juradas anticipadas de importación (DJAI), que provocaron mayores ineficiencias y también ciertos nichos de corrupción que algún día deberían ser investigados por la Justicia, según quejas de empresarios importadores.

También hizo ricos a algunos despachantes de Aduana, que pasaron de tener humildes moradas a casas de grandes proporciones. Paglieri asumirá como subdirectora general de Aduanas, debajo de Sánchez, el hombre del jefe de Gabinete.

Seguiría en revisión el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, de quien algunos sectores del gobierno cuestionan que se envalentonó detrás de su poderoso cargo.