La provincia de Santa Fe solicitó este sábado al gobierno nacional el envío de 1.500 efectivos de Gendarmería Nacional, con el propósito de reforzar la seguridad en las principales ciudades -esta capital y Rosario- ante la eventualidad de una protesta policial que deje sin cobertura a los centros comerciales.

Desde la jefatura de gabinete, a cargo de Jorge Capitanich, se respondió favorablemente el requerimiento y esta misma tarde-noche arribará ese número de efectivos a la provincia.

La solicitud fue efectuada por el gobernador, Antonio Bonfatti, a primera hora de la mañana, como reacción ante la protesta iniciada en la madrugada por algunos pocos efectivos frente a las unidades regionales Uno y Dos, en Santa Fe y Rosario, respectivamente.

Sobre el mediodía, en tres sectores del predio que ocupa la Unidad Regional Uno en el sur de la ciudad, se mantenía la pacífica protesta de la llamada "asamblea de autoconvocados de la ciudad de Santa Fe", formada por policías en actividad que dicen estar francos de servicio y que con el respaldo de Apropol, la entidad denunciada penalmente en la semana por el gobernador Bonfatti.

Piden un salario de 13.000 pesos. El reclamo salarial es similar al que están haciendo policías de varias provincias después de los hechos del pasado martes en Córdoba.

En la ciudad de Santa Fe los comerciantes ubicados en las principales avenidas de acceso (Blas Parera, Facundo Zuviría, General Paz y Aristóbulo del valle, al norte; y J.J.Paso, al sur) comenzaron, pasadas las 11, a cerrar los negocios, luego que por las redes sociales se anunciara la posibilidad de un autoacuartelamiento policial que deje sin seguridad las zonas comerciales y eso posibilite eventuales saqueos.