El Día de la Madre llegará con nuevo aumento en las tarifas de taxis, un servicio que en la Argentina ya es un servicio relativamente más caro que en Nueva York, gracias a la excelente relación entre Mauricio Macri y el líder del gremio de peones de taxi, Omar Viviani.

Viajar en taxi será un 11% más caro. La bajada de bandera diurna pasará a costar $ 11 y la ficha $ 1,10.

El alza también afectará a la tarifa noctura, para los viajes que se hagan entre las 22 y las 6 de la mañana, cuando la bajada de bandera saldrá $ 13,31 y la ficha $ 1,31. Hasta hoy, la bajada de bandera cuesta $ 10 y $ 1 cada ficha, mientras que la tarifa nocturna sale $ 12 y $ 1,2, respectivamente. Este es el segundo de los aumentos de este año acordados por el Gobierno porteño y las cámaras que agrupan a conductores y dueños de taxis.

Así, el servicio acumula un alza del 21% durante 2013. El primer aumento se había aplicado el 1 de agosto. Como comparación, en 2012, la tarifa acumuló un alza del 25%.

Las entidades del sector argumentan que la actualización es para garantizar los niveles del servicio. Y como otros gremios, justifican el alza de los precios en relación al ritmo de la inflación que eleva los valores de combustibles, salarios y de renovación de los vehículos.

Este incremento vuelve a estirar la brecha entre el precio del taxi y el boleto mínimo de colectivo, que cuesta $1,50.

En relación al costo por llamar a un radio taxi, el servicio sigue siendo el mismo: las empresas pueden adicionar seis fichas, con un valor fijo y uniforme, más allá del horario.