Marcharon desde distintos puntos de la Ciudad y el conurbano hacia el Obelisco y Plaza de Mayo. Hicieron un minuto de silencio por la tragedia de Rosario. Cuestionaron la "corrupción"
La gente volvió a marchar contra el gobierno de Cristina Fernández, a quien le cuestionaron la "corrupción", la "inseguridad", la discrecionalidad en la toma de decisiones, la "soberbia", el deseo de "perpetuarse en el poder", entre otros.
Convocados por el denominado 8A, los vecinos llegaron al Obelisco y Plaza de Mayo desde distintos barrios porteños, especialmente desde la zona norte, hasta el Obelisco y la Plaza de Mayo, para protestar contra el gobierno.
Pasadas las 20, por la avenida 9 de Julio desfilaban pacíficamente filas de caceroleros con una extensa bandera argentina, ya sobre el límite de la veda electoral, pero menor cantidad que en oportunidades anteriores, en buena medida por la tragedia de Rosario pero también porque mucha gente no consideró oportuno marchar faltando tan pocos días para las elecciones.
Al inicio de la movilización, en Santa Fe y Callao, un grupo se había aglutinado detrás de una pancarta con la consigna "Stop Corrupción", mientras que otro se había mostrado con disfraces de la presidenta Cristina Fernández y el vicepresidente Amado Boudou, entre otros funcionarios, vestidos de presos.
A pesar de la marcha, no se vio afectado el servicio del Metrobus y permaneció liberada la avenida Carlos Pellegrini para la circulación vehicular. Cerca de las 21, un grupo de manifestantes se aglutinó en la Plaza de Mayo.
En la protesta primaban los reclamos en repudio a la corrupción, la inseguridad y la inflación. En esta ocasión, la movilización no contó con la presencia de dirigentes de la oposición.
A pesar del duelo nacional de dos días que ayer había decretado la Presidenta por la trágica explosión en un edificio de Rosario, los organizadores de la protesta decidieron no suspender las manifestaciones.
Uno de ellos señaló: "Esto no es una fiesta, por eso no correspondía suspenderlo". Por eso, sumaron la consigna:"No más muertes inútiles".
Las manifestaciones también se repitieron , como en otras oportunidades en la residencia presidencial, con banderas argentinas y pancartas, los participantes entonaron el himno frente a la entrada de la avenida Maipú de la quinta, en sintonía con el reclamo que comenzaba a realizarse en otros puntos del país.
En La Plata, los caceroleros se reunieron frente a la sede del Palacio Municipal con reclamos contra el Gobierno tras la inundación que afectó a la zona en abril pasado. "Los muertos de la inundación siguen escondidos" e "Inundados, indignados por la falta de justicia", decían algunas de las pancartas de los ciudadanos que se concentraron en la calle 12, entre 51 y 53, con banderas celestes y blancas.