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21 de noviembre de 2024
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"No vamos a aceptar linchamientos mediáticos"
Con esta frase la presidenta justificó su decisión de postergar el nombramiento de Milani, Criticó a la oposición por este tema y al CELS. "No es la primera vez que discrepamos"
23 de julio de 2013
La presidenta Cristina Fernández defendió este marte la política de Derechos Humanos de su gobierno y avaló la posternación del ascenso del cuestionado César Milani al sostener que no va a aceptar "linchamientos mediáticos".

"No vamos a aceptar estos linchamientos mediáticos, porque ademas no nos harán títeres de nadie, y está claro que todo estos es una cuestión de la campaña electoral", lanzó la presidenta.

Luego defendió la política del gobierno en este tema y cargó contra dirigentes de la oposición: "Lo más tragicómico es que quienes sancionaron las leyes de Obediencia Debida y Punto Final nos acusan a nosotros".

La Presidenta aseguró que seguirá sosteniendo "una política de memoria, verdad y justicia" y cargó contra los legisladores opositores y contra algunos medios de comunicación.

"Los que han tenido responsabilidad con la etapa trágica de la dictadura, pagarán. Pero no equivoquemos el rumbo. No cometamos la misma torpeza de querer enfrentarnos entre uniformados y civiles", manifestó la Presidenta.

Luego se refirió al informe del CELS y en cierta medida le quitó valor al sostener que el "documento tiene partes de expedientes que ya obran en la Justicia. No hay nuevos elementos" .

En el texto de la entidad, se daba crédito a las denuncias que vinculan a Milani con la desaparición de un conscripto en la época en la que era subteniente y estaba destinado a un batallón de la provincia de La Rioja.

La Presidenta hoy lanzó: "Hemos discrepado en otras oportunidades con el CELS, tampoco es para hacerse los rulos".

Cristina Fernández hizo una férrea defensa de la política de Derechos Humanos del kirchnerismo y recordó que en la última década "475 personas han sido juzgadas por delitos de lesa humanidad y 430 han sido condenadas".

"Lo más tragicómico es que quienes se sentaron en una banca y sancionaron la ley de Obediencia Debida y Punto Final, que permitieron que los torturadores caminaran por las calles, nos acusan a nosotros", dijo la jefa de Estado.

Además, señaló: "Durante más de diez años, a Néstor Kirchner y a mí se nos acusó en ríos de tinta que nuestra lucha por los Derechos Humanos era de venganza. Quienes nos habían criticado hoy se han convertido en el principal ariete en nuestra contra. Por eso pedí a nuestros senadores que posterguen hasta fin de año el tratamiento de todos los pliegos de ascensos militares".