La intimidad de uno se los mayores ídolos de la música popular de Argentina, Sandro, saldrá a la luz en un importante muestra que buscará exhibir reliquias y material nunca visto de la vida del mito que fue el cantante construido con tanto amor por su alter ego, Roberto Sánchez y la devoción de miles de fanáticos en toda latinoamerica.

"Yo, Sandro", la muestra que se inaugurará el próximo 13 de agosto en el Centro Cultural Borges, tuvo su presentación oficial y en ese encuentro casi formal, la magia de la devoción y la intensidad que propone su historia bañó a los presentes y generó ya una expectativa que anuncia un nuevo rito en las próximas semanas: ir a ver la vida del ídolo en vivo y en directo.

Y esto fue gracias a un gran trabajo de Alejandro Salade, quien fue el generador de este proyecto y curador de los cientos de objetos y reliquias de la vida intima de Sandro que llegaron a su manos por la decisión de su viuda, Olga Garaventa quien le abrió las puertas de la mansión de Banfield.

"Quise trabajar con Sandro porque es adrenalina pura, intensidad, y en esta época que han cambiado las estéticas, Sandro, quien era considerado `grasa` décadas atrás, hoy se redescubre como un personaje arrollador", manifestó Salade, en charla con Asteriscos.Tv.

El coordinador de este proyecto contó como Garaventa lo eligió para este trabajar luego de cinco minutos de charla y como , con un respeto "inmenso" permitió que durante un año y medio buscara un sinfín de materiales que van desde partituras originales, regalos, instrumentos, fotos, trajes y hasta grabaciones inéditas que "serán una sorpresa" para su fans.

Salade ya había realizado un trabajo similar con el artista de la copa española Miguel De Molina, y en este proyecto no solo puso a todo su equipo sino también la devoción personal por un artista que admira profundamente.

Por su parte, Olga Garaventa le señaló a este portal que la experiencia de abrir as puertas de su casa que compartió con Sandro , y entregar todo el material que Roberto Sánchez guardó con devoción casi de coleccionista de su carrera, fue "muy movilizante".

"Roberto era muy meticuloso y guardaba todo, hasta los papelitos mas insignificantes. Cuando lo conocí a Alejandro, solo me llevo cincos minutos y tres palabras darme cuenta que era la persona para llevar adelante este proyecto que mi marido quería para devolverle a su seguidores tanto amor", contó Garaventa.

La muestra tiene dos madrinas de lujo, que estuvieron presentes en el evento, se trata de Soledad Silveyra, protagonista de dos películas de Sandro, "Quiero llenarme de tí" y "Gitano" y Teté Coustarot, quien fue fanática y luego amiga del cantante y hasta reconoció que "fue su gran amor platónico".

"El era el prototipo de hombre argentino soñado: protector, gracioso, con códigos, y fundamentalmente, un hombre que a ninguna nos engañó", definió la ex modelo.

En tanto, Soledad Silveyra,destacó "todo lo que tuve que enfrentar por ser una chica de San Isidro y ser su pareja en las películas", al recordar al auditorio que en sus inicios el cantante era considerado "mersa".

"Hoy Roberto Sánchez es un mito, y me emociona mucho que el Centro Cultural Borges se ponga al frente de los artistas populares y reciba una muestra como esta", destacó la actriz.

El legado de Sandro no es casual que se pueda ver este año, ya ue en noviembre de 2013 se cumplirán 50 años de la primera grabación del cantante con la compañía CBS y por ese motivo se lanzara un trabajo discográfico con material de toda al carrera del arista fallecido en enero de 2011.

Esta muestra, que revolucionara sin dudas el Centro Cultura Borges, según advirtieron los organizadores, cuenta con fotos inéditas, detalles de su carrera, varios trajes, uno de ellos prestado por un fan que lo ganó en un sorteo, instrumentos y hasta un Rambler Special que el propio Sandro tuneó con una alfombra, por supuesto roja.

Asimismo, también se podrá escuchar su música y entre ese material se destaca parte del sonido directo de su concierto en el Madison Square Garden, que realizó en la década del setenta, y que nunca se difundió.

Ph: Monserrat Marín