El intendente de La Plata, Pablo Bruera,negó que tenga planes de renunciar luego del escándalo que se desató el engaño de su presencia en la capital provincial el martes a la noche cuando aún estaba de vacaciones en Brasil.

"No voy a renunciar", afirmó Bruera al ser consultado al respecto tras trascender un twitter personal que aseguraba que se hallaba recorriendo las zonas afectadas por la catástrofe cuando en realidad estaba regresando de sus vacaciones en Brasil.

"Imagínese lo que sería en este momento que yo renuncie. Dentro de poquito hay elecciones, los ciudadanos podrán elegir", sostuvo Bruera al ratificar su decisión de continuar al frente de la intendencia platense.

En ese sentido, el jefe comunal intentó bajarle los decibeles al escándalo desatado por el tuit: "No entiendo que haya sido una falta, sino un error de comunicación".

De todos modos, Bruera reconoció que debería haberse ido de vacaciones a un destino más cerca por si surgía cualquier problema en su partido, como sucedió con el torrencial diluvio. "Es muy probable que sea así, lo tomo como una autocrítica", admitió más temprano.

El miércoles a la madrugada la cuenta oficial de Twitter de Bruera publicó una foto con el mensaje: "Desde ayer a la noche recorriendo los centros de evacuados". Sin embargo, la mentira fue rápidamente descubierta, ya que se detectó que el intendente recién regresó de sus vacaciones en Brasil a las 9 de la mañana en el vuelo número 1259 de Aerolíneas Argentinas.

"Debido a un error de mi equipo de comunicación en uno de mis tuits, debo aclarar que llegué hoy (por ayer) a media mañana. Fue en ese momento que me puse a recorrer las zonas afectadas", reconoció luego con otro mensaje en la red social.