El equipo de Avellaneda pasó por arriba a San Martín en San Juan hasta que la hinchada local comenzó a arrojar piedras y el árbitro lo suspendió
Racing fue un tornado que pasó por arriba a San Martín de San Juan por 3 a 0, hasta que faltando dos minutos para el final el árbitro, Carlos Maglio, suspendió el partido porque la hinchada local comenzó a arrojar piedras a la cancha.
Los goles fueron marcados por Bruno Zuculini, a los 25 minutos del primer tiempo, y los juveniles Luciano Vietto y Rodrigo De Paul -convirtió un golazo-, a los 12 y 35 de la segunda etapa. El árbitro suspendió el partido a los 43 minutos del segundo tiempo cuando hinchas de San Martín de San Juan comenzaron a arrojar piedras y otros elementos al campo de juego.
El elenco de Avellaneda dejó su imagen intacta ante las miradas de quienes imaginaban que Racing iba a "ir a menos" para que su archirrival Independiente quede más cerca del descenso.