Las exportaciones disminuyeron 4 por ciento y las importaciones subieron 1%. Las compras de combustible aumentaron un 74 por ciento
La balanza comercial registró en enero un superávit de apenas 280 millones de dólares, lo cual representó una caída del 49 por ciento con relación a igual mes de 2012.
Según los datos del INDEC, el deterioro se explicó por una baja en las exportaciones y un aumento de U$S 290 millones en la compra de energía.
Las ventas al exterior disminuyeron 4%, a 5.665 millones de dólares, y el INDEC reconoció una baja de 8% en las cantidades, mientras que los precios subieron 4 por ciento.
Dentro de las exportaciones el INDEC marcó caídas de 23% en los despachos de combustibles y energía, de 6% en las manufacturas de origen industrial (MOI) y de 5% en las manufacturas de origen agropecuario (MOA).
Estas disminuciones se vieron compensadas parcialmente por una suba de 9% en las ventas de productos primarios.
En tanto, durante el primer mes de año las importaciones subieron 1% y llegaron a 5.385 millones de dólares, a partir de de un alza de 4% en los precios y una baja de 3% en las cantidades.
Al desagregar su composición se observa una suba de 74% en la compra de combustibles y energía, integrada por un alza de 84% en la cantidad comprada, con una caída de precios de 5 por ciento.
Esto significa que para sostener su matriz energética el Gobierno pasó a gastar 681 millones de dólares, contra los 391 millones erogados en enero del año pasado. Las compras de bienes de capital cayeron 6% y las de bienes de consumo 2 por ciento.
Con relación a los destinos, el 32% de los despachos se dirigieron al MERCOSUR (incluida Venezuela), mientras que un 11% fue al NAFTA y similar porcentaje a la Unión Europea.
A su vez, un 9% se embarcó hacia el sudeste asiático y el mismo nivel fue a Medio Oriente.
Con relación a las importaciones, el 25% llegó desde el MERCOSUR y en igual medida desde el sudeste asiático, China y Japón. En tanto, el 18% desembarcó desde la Unión Europea y el 14% desde el NAFTA.