El paro de la CGT y la CTA se hizo sentir con fuerza hoy en casi toda la Argentina, y sustentó su poderío en unos 600 piquetes que se hicieron en distintos punto clave del país.

El titular de la CTA opositora, Pablo Micheli, aseguró que el paro al que convocó junto al camionero Hugo Moyano fue "un éxito en todo el país".

La medida de fuerza contra las políticas cristinistas se sintió fuerte también en el comercio, que adhirió al paro en la Ciudad de Buenos Aires y varios partidos del conurbano.

El centro porteño brindó un espectáculo nunca visto en día de semana, con una avenida 9 de Julio semivacía y apenas turistas en las calles que observaban con curiosidad lo que estaba ocurriendo.

El paro tuvo alta adhesión de muchos gremios y la contribución clave de los bloqueos de tránsito que arrancaron temprano, incluso desde la medianoche.

Los principales accesos a la capital estuvieron totalmente cortados desde temprano, hubo piquetes en decenas de puntos del conurbano y el interior del país, casi todas las líneas de trenes están paradas -también la línea B del subterráneo-, se cancelaron casi todos los vuelos nacionales y regionales y las calles porteñas mostraron un tránsito menor al habitual.

El Puente Pueyrredón estuvo cortado por la mañana en ambos sentidos por parte de agrupaciones de izquierda y de la CTA opositora.

Los manifestantes se retiraron poco después del mediodía, luego de que Micheli anunciara que levantaban los piquetes.

Por la mañana, también fueron bloqueadas completamente la autopista Riccheri, el acceso Oeste, la General Paz y la Panamericana, entre otras.

El primer piquete arrancó antes de las 6 en el kilómetro 21 de la ruta 3, en el cruce con las vías del ferrocarril, liderado por militantes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) que lidera Juan Carlos Alderete.

Solo su movimiento había prometido 160 cortes, a los que deben sumarse los de otras agrupaciones y sindicatos.

La Unión Tranviaria Automotor no se plegó al paro, pero las líneas de trenes fueron interrumpidas, con excepción del Belgrano Norte, en buena meida por el rol clave que jugaron los señaleros.

También por bloqueos de manifestantes en las cabeceras o distintos puntos del recorrido, aunque los trabajadores de la línea Sarmiento y la Mitre adhirieron al paro.

Tampoco funcionó desde la mañana la línea B de subterráneos –que también adhirió a la protesta-, y en la A las boleterías estuvieron cerradas y las formaciones circularon con 20 minutos de demora.

La situación de los vuelos también fue complicada, ya que no opera Aeroparque y no vuelan los aviones que tengan tripulación argentina.

Fueron cancelados los vuelos de Aerolíneas Argentinas y Austral, los nacionales y regionales de LAN, y prácticamente todos los vuelos regionales y nacionales en todos los aeropuertos del país.

En la Ciudad de Buenos Aires fue notorio también el paro de los recolectores de basura. Y el de los bancarios, que se sintió en casi todo el país. En los locales comerciales y gastronómicos, la situación fue mucho menos clara: muchos abrieron, otros no y algunos denunciaron que fueron amenazados por militantes que pretendían obligarlos a plegarse al paro.

Muchas escuelas recomendaron a sus alumnos que, si podían, se quedaran en sus casas.

En La Plata hubo piquetes y no funcionaron las estaciones de servicio y además de los bancarios y recolectores de basura, se plegaron gremios médicos y docentes; la estación de trenes estuvo cerrada y los micros a Buenos Aires se cancelaron por los piquetes. El panorama fue similar en Rosario y Santa Fe y en Córdoba y Mendoza.

Aunque oficialmente el paro arrancó a la medianoche, en los hechos comenzó ayer a las 18 en los pasos fronterizos de Uspallata (Mendoza), Iguazú (Misiones), Güemes (Salta) y Paso de los Libres (Corrientes), donde los camioneros mantendrán detenidos, según estimaciones del gremio, cerca de 2.000 vehículos de transporte de larga distancia.

Moyano destacó la alta adhesión a la protesta y se quejó del "ninguneo" y las "amenazas" de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a los reclamos de los sindicatos. Por la tarde, tenía previsto dar una conferencia de prensa.

Con piquetes en los principales acceso a la ciudad de Buenos Aires, con la mayoría de los trenes sin servico, la línea B de subtes paralizada y los vuelos de cabotaje suspendidos en el panorma de las primeras horas del inicio del paro de 24 horas prganizado por la CGT opositora y la CTA en reclamo al Gobierno nacional.

Tres piquetes se realizaron en las localidades bonaerenses de General Pacheco, Isidro Casanova y el centro porteño, en el marco del paro de las centrales obreras opositoras contra el Gobierno.

El primer corte comenzó a las 6 en el kilómetro 21 de la ruta 3 y las vías del ferrocarril, por parte de militantes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) que lidera Juan Carlos Alderete.

Asimismo, varias agrupaciones estudiantiles interrumpieron el tránsito en Corrientes y Callao, mientras que diez minutos después trabajadores de empresas alimenticias cortaron la autopista Panamericana, en el kilómetro 35, a la altura de Henry Ford.

En cuanto a los vuelos, los servicios se ven afectados principalmente los de cabotaje de todas las líneas aéreas. Debido a las dificultades, LAN decidió cancelar todos sus vuelos internos que partían hasta las 16.