La arenga del entrenador de Arsenal, Gustavo Alfaro, tras la finalización de lo 90 minutos y antes de la ejecución de los penales fue la postal de un equipo ganador, que minutos después escribió otra página de hazaña en su breve historia como institución a lograr la primera Supercopa Argentina la derrotar a Boca, 4 a 3 en la definición de los 12 paso.

Con una tarea soberbia del arquero del equipo de Sarandí, Cristian Campestrini, quien tuvo su noche de gloria al atajar tres remates, y siendo el último, el ejecutado por Colazzo, el fundamental ya que terminó definiendo la serie que se extendió a seis remates por bando.

Tras un empate sin goles en los 90 minutos, donde Arsenal estuvo mas cerca y mereció llevarse una victoria, el arquero de los de Sarandí se lució atajándole sus disparos a Caruzzo y Paredes primero, mientras su colega Ustari también rindió al atajarle a Cappa y Carbonero, para terminar la primera serie de cinco remates 3 a 3.

Este es el segundo título de la temporada de Arsenal, quien llegó a esta final de la Supercopa tras ser el campeón del Torneo Clausura 2012, en junio pasado, mientras Boca buscaba, en al era Falcioni su tercera corona en un años, tras ganar el Apertura 2011 y la Copa Argentina 2012.

Esta es la primera vez que se juega este trofeo que a partir de ahora unirá a los campeones de la temporada de los torneo de AFA, el de Primera División y la Copa Argentina, y entrar en línea a las grandes ligas europeas que tiene este torneo entre sus campeones.

La final se jugó en el estadio Bicentenario de Catamarca que estuvo repleto con una gran mayoría de hinchas de Boca que mordieron el polvo de la derrota, mientras un grupo muy reducido de hinchas de Arsenal festejaba y se hacía escuchar.

Es el cuarto título en la historia del club fundado por Julio Grondona en los sesenta, tras haber ganado tambien la Copa Sudamericana en 2007 y la Copa Suruga Bank en 2008.