"Este gobierno lucha por destruir a la clase media, para dominarnos", fustigó la diputada de la Coalición Cívica al salir al cruce de las críticas del gobierno al cacerolazo del jueves
La diputada nacional Elisa Carrió destacó el cacerolazo del jueves último e ironizó que "nadie de la marcha tenía Rolex de oro con brillantes, nadie tenía un Hermes de 35 mil euros.
Carrió sostuvo que "hay gente progre que viste bien".
"A mí me decían 'nena bien', que teníamos que odiar a nuestra clase, y un poco decía esto Juan Abal Medina [cuando salió a criticar a los manifestantes], quien es riquísimo y su padre es riquísimo, y vive en México, y es asesor de [el magnate Carlos] Slim", expresó la legisladora en diálogo con Radio 10.
Sostuvo que la alta convocatoria de la marcha fue una "resistencia frente al fascismo" y señaló que hubo "una marcha por la libertad".