En otra gran actuación, Los Pumas estuvieron muy cerca de dar el zarpazo al caer ante los poderosos All Blacks por 21 a 5, en Wellington, en un partido que jugaron de igual a igual y donde solo los locales pudieron quebrar sobre el final del choque.

El equipo nacional, en el tercer partido de la Rugby Champioship, volvió a demostrar su crecimiento y exhibió uno de sus pilares: la férrea defensa y funcionó muy bien en la etapa inicial, donde el poderoso ataque de Nueva Zelanda no pudo quebrarlo.

De esta manera los All Blacks no pudieron despegarse en el marcador, al que no quebrar el in-goal argentino, y se fueron al vestuario en el primer tiempo con una ventaja de 6 a 5.

Recién en el segundo tiempo Nueva Zelanda logró quebrar la resistencia Puma y sucedió de manera muy similar a la última Copa del Mundo, cuando los locales quebraron el in-goal argentino a poco del final.

En el primer tiempo, Argentina estuvo por un momento arriba en el marcador tras un try de Roncero que puso 5 a 3 el partido tras la apertura del tanteador por parte de los Blacks, que luego marcaron un penal más y se fueron ganadores 6 a 5 en el parcial.

En el segundo tiempo, las cosas se le complicaron a la Argentina. Nueva Zelanda dominó el terreno y la pelota, además de someter al juego físico a los Pumas.

Nuevamente Cruden, el pateador de penales de los locales, le dio mayor ventaja en el marcador, pero recién los All Blacks s quebraron la línea final argentina recién en el minuto 67, con el try de Savea.

Tras esta buena actuación en la tercera fecha del torneo que reúne a los tres equipos más poderosos del mundo, Los Pumas seguirán sumando experiencias y buscaran arañar hazañas en el cuarto choque, el sábado que viene frente Australia.

Luego de enfrentar a los Wallabies, Los Pumas seguirán en el Rugby Champioship jugando de local, primero en La Plata y y después en Rosario, ante los All Blacks, y Australia, respectivamente