A partir de agosto, financiarse con la tarjeta de crédito será más caro ya que las tasas aumentaran en promedio cuatro puntos y llegan a un máximo de 43% para el pago en 18 cuotas.

Los aumentos, anunciados por Visa y MasterCard a principios de mes, son para los intereses que cobran los plásticos por el financiamiento ciertas compras o los saldos de la tarjeta, es decir que no incluyen las distintas promociones que rigen para pagar en cuotas directamente en los comercios.

En ese marco, las tarjetas justificaron las subas en que los bancos están teniendo más dificultades para captar ahorros (depósitos) y en la mayor morosidad del sistema crediticio.

A partir de este mes, la tasa nominal anual de los planes de financiamiento de entre dos y tres cuotas pasará del 34% al 37% o 38% anual (según la marca); la de los planes de entre cuatro y seis cuotas, del 36% al 39,5%; la de los de entre siete y dieciocho cuotas, del 40% al 43%.