Es sobre el traspaso del subte. Pidió que el Estado se haga cargo del "10% de la obras que deben y la posibilidad de contraer deuda internacional". El gobierno niega esa propuesta
El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, reveló que en la última charla que mantuvo con Florencio Randazzo y el Gobierno nacional niega, ofreció hacerse cargo del servicio con dos condiciones: que se le pagase un décimo de las obras que, según alega, la Nación adeuda en ese transporte y que se autorizase a la Ciudad de Buenos Aires a contraer deuda en los mercados internacionales.
"Nunca, como empresario ni como dirigente deportivo, negocié así. Para redondear, por el 10% de lo que nos deben y el derecho a endeudarnos, nosotros aceptábamos. Y dijeron que no", reveló el jefe de Gobierno porteño.
Macri agregó además que el ministro le señaló que él "no puede hacer nada, porque la que decide es la presidente", en una diálogo que le propio ministro dice que "nunca existió".
Macri se siente, en medio de este conflicto, un "espectador más" y cargó contra la presidente, ya que según su mirada, "no quiere que haya subtes".
De todas formas, más allá que adelantó que no hay mas propuestas para seguir negociando, Macri confirmó que irá contra la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), a quienes volvió a considerar una "creación" del kirchnerismo. "Vamos a tomar todas las sanciones que podamos contra los metrodelegados", confirmó.
Finalmente, el dirigente expresó que el conflicto por el traspaso del subte se resuelve muy fácil: "Si dejo de expresar cualquier tipo de disidencia y comenzara a actuar como ella ha logrado que actúe el peronismo, sus gobernadores. Además debería decir que no soy candidato en 2015 y se arregla todo".