El recaudador bonaerense utilizará el buscador satelital de la empresa norteamericana para poder detectar a aquellos contribuyentes que no declaran lo que tienen
La caza virtual de evasores ya comenzó. A través del reconocido software Google Earth, un mapa digitalizado que muestra imágenes satelitales en Internet, el polémico subsecretario de Ingresos Públicos bonaerense, Santiago Montoya, comenzó a ensanchar el grosor de su caja de recaudación impositiva.
El original sabueso se basó en el programa ideado por el buscador norteamericano y en una planimetría digitalizada por catastro para detectar hoy más de 110.000 metros cuadrados de construcciones no declaradas en Nordelta, La Salada y cuatro countries del Conurbano.
La valuación de esas edificaciones alcanza los 100 millones de pesos y la deuda por el Impuesto Inmobiliario es superior a 1,6 millones.
Así lo informó hoy, a través de un comunicado de prensa, el Ministerio de Economía bonaerense. "Por primera vez se utiliza el relevamiento satelital con planimetría digitalizada por Catastro. Se notifican las irregularidades a los administradores y a cada propietario de los complejos", señaló la misiva y agregó que éstos "tienen un plazo de 15 días para realizar las declaraciones que corresponden".
Algunas irregularidades fueron encontradas en el Centro Médico Nordelta y en el Centro Comercial del mismo complejo. Allí, según informaron las autoridades, "se está realizando la fiscalización de sus declaraciones, dado que los relevamientos realizados por satélite con planimetría digitalizada de Catastro, permiten detectar grandes discrepancias entre las declaraciones realizadas por sus propietarios y las construcciones que se advierten".
Otras anomalías surgieron además del relevamiento del complejo La Salada. Allí el organismo oficial notificó a la administradora Urkupiña SA por 14.670 metros cuadrados de construcciones no declarados. De la misma manera, en el mismo complejo, se notificó a la administradora Balneario Ocean por siete partidas declaradas como baldías y que cuentan con construcciones por un total de 1460 metros cuadrados.
Countries. En tanto, en cuatro clubes de campo ubicados en la zona norte del Conurbano, se está notificando a administradores y propietarios sobre construcciones realizadas y no declaradas. También a estás se les otorgará un plazo de 15 días poner en orden su situación.
En caso de que no se hagan las declaraciones correspondientes en el plazo fijado, las mismas se harán de oficio y tendrán efecto retroactivo a la fecha de su construcción, informó el comunicado.
En el club de campo Altamira se está puso al tanto a los propietarios de 102 casas terminadas y ocho obras en construcción con una superficie a incorporar estimada en 25.000 metros cuadrados.
También se avisó a propietarios del countrie Santa Clara, donde hay 27 casas terminadas y 31 obras en construcción con una superficie a incorporar de 6750 metros cuadrados.
Al mismo tiempo, en el San Isidro Labrador, se notificó a 92 propietarios de casas terminadas y 83 propietarios de obras en construcción con una superficie a incorporar estimada en 23.000 metros cuadrados.
Simultáneamente, en el countrie Santa Catalina, se informó a los propietarios de 141 casas terminadas y de 123 obras en construcción con una superficie aproximada a incorporar de 34.391 metros cuadrados.
Según las direcciones de Catastro y rentas, en todos los casos se realiza la comunicación en la puerta de cada complejo y se notifica a cada uno de los propietarios, informándoles del plazo que se les otorga para presentar las declaraciones correspondientes.