El represor Ricardo Cavallo aceptó ante la Audiencia Nacional de España ser extraditado a la Argentina para ser juzgado en el país por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.

El anuncio lo realizó hoy su abogado, Fernando Pamos de la Hoz.

Su letrado informó que Cavallo fue llevado ayer ante el Juzgado de Instrucción Número 4 de la máxima instancia judicial española, donde dio su consentimiento para ser entregado a la Justicia argentina para ser juzgado en las cinco causas que tiene abiertas en su contra. Ante el juez Fernando Andreu, el ex militar aseguró que es "inocente" de los hechos que se le imputan.

Está acusado de los delitos de "privación ilegal de la libertad agravada de forma reiterada, imposición de tormentos con resultado de muerte, imposición de tormentos, robo, extorsión, falsedad ideológica de instrumento público, asociación ilícita y otros".

En España, Cavallo estaba a la espera de juicio oral en el que afronta una pena mínima de 13.332 años de cárcel y una máxima de 17.010 por "crímenes contra la humanidad o genocidio". Pero la Justicia española había declinado juzgarlo al considerar que, tras la derogación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, debía se la Justicia argentina quien lo juzgue, ya que de esa manera no existe ningún impedimento.

Fue a raíz de este hecho, puntualmente por la demora en la llegada del pedido de extradición argentino, que Cavallo fue liberado por error a fines de enero pasado, aunque más tarde el juez Andreu le dictó la prisión preventiva y el represor volvió a la cárcel.

El abogado de Cavallo explicó además que presentó ante el juez un escrito enviado a la Embajada de México en España en el que se informa que Cavallo "muestra conformidad con su extradición a su país de origen", por lo que "no debe existir ningún impedimento para que esto produzca".

A principios de febrero, el Consejo de Ministros español decidió demorar la extradición de Cavallo al exigir el consentimiento de las autoridades mexicanas, ya que el represor fue extraditado de ese país a España para ser juzgado por genocidio y terrorismo. Cavallo fue detenido en México en agosto de 2000. Tres años después fue extraditado a España por orden del juez español Baltasar Garzón. Desde entonces, está detenido en el penal madrileño de Soto del Real, en una celda común.