3 de diciembre de 2024
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Otra vez la violencia sacude al fútbol del ascenso
Varias personas resultaron heridas, dos con balazos, en un choque entre las hinchadas de Los Andes y Talleres de Remedios de Escalada, en Gerli. La policìa desbordada
15 de febrero de 2007
Metropolitana antes de un partido en la cancha de El Porvenir, en la localidad bonaerense de Gerli.
Personal de la Guardia del Hospital "Evita" de Lanús dijo en declaraciones a la agencia Noticias Argentinas que dos personas recibieron allí atención médica luego de ingresar al lugar con "heridas de arma de fuego calibre 38", sin que la vida de ellas corriera peligro.
Otros tres hinchas presentaban heridas de bala de goma, tras una gresca entre aficionados de Talleres de Remedios de Escalada y Los Andes, un nuevo episodio de violencia que sacude al fútbol argentino y agudiza los cuestionamientos sobre la eficacia de la Policía para montar operativos de prevención.
Debido a los disturbios, el ministro de Seguridad bonaerense, a cargo de León Arslanian, aplicaría medidas de rigor y no le prestaría más servicio policial a Talleres, cuyos simpatizantes generaron la gresca al atacar a pedradas a un grupo de gente del club de Lomas de Zamora.
En caso de que la medida de rigor se haga efectiva, Talleres tendrá que jugar a puertas cerradas al menos hasta que finalice el actual Torneo Clausura 2007.
Más de 50 simpatizantes habrían resultado heridos y muchos de ellos fueron atendidos dentro del club, en algunos casos por los médicos de ambos planteles. Tres policías también sufrieron lastimaduras leves.
Durante los disturbios, la policía reprimió a los revoltosos con gases lacrimógenos y balas de goma.
"Yo pienso que todos estos equipos que generan estas cosas tienen que desaparecer del fútbol argentino", aseguró esta noche Mario Gallina, uno de los hombres fuerte del Comité Provincial de Seguridad Deportiva (COPROSEDE).
Según relataron testigos en declaraciones a la agencia Noticias Argentinas, los incidentes se prolongaron durante más de media hora en cercanías del estadio de El Porvenir, minutos antes del inicio del partido entre dos grandes rivales del sur del Gran Buenos Aires.
De acuerdo con el jefe del operativo policial, Daniel Cosimano, un grupo de hinchas de Talleres "se descolgó de la caravana" que llegaba a la cancha y atacó a simpatizantes del conjunto lomense.
"Eran 20 ó 30 de Talleres contra unos 200 de Los Andes, todos tirándose piedras y con la policía en el medio sin poder hacer nada, porque recibía de los dos lados", comentó el testigo en diálogo con un cronista de NA.
Al menos dos vehículos particulares y un camión policial resultaron gravemente dañados, al igual que las fachadas de varias casas de Vélez Sarsfield casi esquina General Rodríguez y en otras calles de la zona.
Imágenes de vídeo tomadas por un vecino y difundidas por la señal de cable Todo Noticias mostraron a una veintena de hinchas del equipo de Remedios de Escalada arrojando proyectiles, sin que efectivos de la policía bonaerense intervinieran con celeridad para reestablecer la calma.
El jefe de la Departamental de Lanús, Cosimano, comentó que la Fuerza tenía la misión de "acompañar" a las hinchadas a la cancha, pero no de "guiarlas".
Los disturbios comenzaron sobre la avenida Hipólito Yrigoyen, después de que simpatizantes de Talleres aprovecharan una grieta en el operativo de prevención para abandonar los micros en los que se trasladaban e ir en busca de los aficionados de Los Andes, que procuraban ingresar al estadio.
Tras la refriega, muchos simpatizantes entraron lastimados a la cancha a presenciar el encuentro, con victoria por 4 a 0 del equipo de Remedios de Escalada. El partido se disputó con normalidad, a pesar de unos trascendidos que indicaron durante la
tarde que se había suspendido.
Si bien se registraron decenas de heridos, sólo cinco fueron atendidos en el Hospital "Evita" de Lanús, aunque dos de ellos ingresaron con heridas de bala.
Hinchas contaron luego del partido que las barras bravas de ambos clubes se habían amenazado previamente por intermedio de páginas de internet partidaria.
"Estas cosas suelen suceder, pero después no llegan a los hechos. Es algo que hacen personas descerebradas. Debemos terminar con esto de una vez por todas", subrayó Gallina, en declaraciones al noticiero Telenoche, de Canal 13.
Pese a la gravedad de los incidentes no se habían registrado detenciones hasta las 21:00 del miércoles. El partido terminó a las 19:00 y se jugó en Gerli porque la cancha de Talleres –el conjunto que debía ser local- era considerada como "insegura" por el COPROSEDE.