Ante la falta de efectivos de la Policía Federal en las estaciones y la ausencia de fuerzas de la Policía Metropolitana, las seis líneas del subte y el Premetro no funcionan por una protesta gremial "por tiempo indeterminado".

La decisión fue tomada por los trabajadores que responden a la Unión Tranviarios Automotor (UTA) quienes sostuvieron que no habrá servicios hasta que no estén dadas las condiciones de seguridad para brindar el servicio.

Esta medida del gremio de paralizar los subtes no cuenta con el aval de los "metrodelegados", que el miércoles a la noche sostuvieron que ellos no se sienten representados por la UTA y no iban a hacer un paro.

"Nosotros no nos sentimos representados por este gremio que pacta con los empresarios. Vamos a presentarnos a trabajar y en la boletería donde no haya custodia policial la vamos a cerrar y levantar los molinetes para que la gente viaje sin pagar", dijo el delegado Claudio Della carbonara en el programa Asteriscos AM de Radio El Mundo.

En esa línea, el sindicalista repartió responsabilidades tanto al gobierno nacional como a la administración de Macri y dijo que el transporte público "está colapsado" por la falta de inversiones reales desde hace muchos años..

En medio de esta interna sindical, los usuarios vivieron este jueves muchas complicaciones para viajar por la Ciudad, debido a que las decenas de miles de pasajeros que debían movilizarse por ese medio de transporte utilizaban desde temprano medios alternativos, como colectivos y taxis, que se veían saturados.

Por su parte, la empresa concesionaria Metrovías informó a través de un comunicado que la medida liderada por la UTA "consiste en impedir el movimiento de las formaciones en las distintas cabeceras de la red", y lamentó los inconvenientes que genera esta decisión a "más de 1.200.000 pasajeros que usan diariamente este medio de transporte para trasladarse en la Ciudad".