Con ráfagas de vientos de hasta 120 kilómetros por hora y un intenso granizo, al menos 300 cordobeses debieron ser evacuados. El temporal duró media hora y dejó zonas anegadas
Un temporal de lluvia, ráfagas de vientos y granizo se cobró dos víctimas, dejó más de 15 heridos y 300 personas evacuadas en la provincia de Córdoba.
En tan solo media hora, y tras un intenso calor, los vientos de más de 120 kilómetros por hora y la caída de granizo generaron destrozos y dejaron barrios enteros anegados. La peor noticia llegó cuando se supo que dos personas murieron por el temporal.
La primera víctima fatal murió cuando un árbol se desplomó sobre el auto que conducía. Se trata de Jorge Carrizo, cuyo automóvil Peugeot 206 quedó aplastado en la avenida Capdevila, kilómetro 16, en Chacras de la Merced, en el este de la capital cordobesa, según precisó el ministro provincial de Desarrollo Social, Daniel Passerini.
La segunda, fue una adolescente de 14 años, cuya identidad aún no se ha difundido. Se trata de una motociclista que recibió el impacto de un árbol que cayó sobre su cabeza en el barrio Los Naranjos.
En tanto, un colectivo de la línea diferencial D4 se vio desbordado por el ingreso del agua, ante la mirada atónita de los pasajeros que se trasladaban en él.
Además, cayeron unos 200 árboles, postes y estructuras de cemento que sostienen las redes de alta tensión; volaron techos de chapa, muchas calles céntricas se anegaron y hubo cortes de energía en los barrios de Las Palmas, Tronador, Santa Isabel y Talleres.
Desde el gobierno provincial informaron que el servicio de luz se normalizará en dos o tres días. Luego de la terrible tormenta, 180 distribuidores de luz, de los 300 que posee la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) en la capital provincial, sufrieron daños, lo que dejó a más del 50% de la ciudad sin el servicio.
Por su parte, el intendente Ramón Mestre decretó la emergencia, lo que supone la conformación de un comité de crisis. Unas 165 personas pasaron la noche en el Polideportivo General Paz, mientras que decenas de familias que se vieron afectadas se negaron a ser evacuadas por el temor a los saqueos.