Los dos clubes más importantes del país, en categorías diferentes, se miden en un controvertido superclásico, sin perder la pasión. Desde las 22.10
River y Boca se enfrentarán esta noche en Resistencia a partir de las 22.10, en un partido distinto porque lo harán por primera vez desde que el conjunto "millonario" participa del torneo de la Primera B Nacional. Habrá un estricto control policial que afectará a más de 2.000 efectivos.
Y esa situación, precisamente, la de que no exista la posibilidad de enfrentarse oficialmente durante esta temporada 2011-2012 alimenta el morbo que despliegan, aun sin admitirlo, los protagonistas centrales de este clásico, para algunos, el "más importante a nivel mundial", por encima inclusive de un Real Madrid-Barcelona, de un Inter-Milan o un Flamengo-Fluminense.
Porque, ante un eventual temor a que se produzcan disturbios, los directivos de River, con su presidente Daniel Passarella a la cabeza, y hasta el técnico Matías Almeyda manifestaron, originalmente, la oposición a disputar no sólo este partido de mañana en Resistencia sino también el pautado para el domingo en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza.
Uno de los vicepresidentes xeneizes, Juan Carlos Crespi, en tanto, también descargó una `chicana` hacia el tradicional adversario, sentenciando que Boca "no debería jugar con equipos que actúan en la B Nacional".
Sin embargo, los contratos comerciales firmados por dirigentes de ambas entidades y montos ya percibidos por los dos clubes hacen que este clásico, como el de Mendoza, se jueguen en forma casi imperativa.
El cotejo pautado en el estadio del club Sarmiento de Resistencia será el primer clásico, desde aquel jugado en mayo pasado, cuando Boca ganó en la Bombonera por 2-0, en aquella tarde del polémico arbitraje de Patricio Loustau, por el pasado Clausura 2011.
En el estricto sentido futbolístico, en tanto, también hubo disputas dialécticas. Y el que `lanzó la primera piedra` resultó un enojado DT boquense, Julio Falcioni, al tomar nota de que no podría utilizar al goleador uruguayo, Santiago Silva, flamante incorporación que solamente estará a disposición para la Copa Libertadores.
Pero el técnico del último campeón del fútbol local tampoco podrá utilizar a Darío Cvitanich, expulsado en el 0-1 del sábado con Independiente, además de los lesionados Walter Erviti, Diego Rivero, Clemente Rodríguez, entre otros.
Por el lado de River, en tanto, el arquero Daniel Vega trasladó el favoritismo al adversario, al sostener que Boca "es el último campeón del fútbol argentino, ellos son los candidatos".
El técnico Almeyda, en tanto, no definió todavía la alineación y dejó planteadas dos dudas, que tienen que ver con las eventuales inclusiones de Leonardo Ponzio y David Trezeguet, los dos refuerzos que llegaron para la campaña, desde el minuto inicial.
Lo cierto es que desde ambos campamentos saben que el resultado no alterará los objetivos prefijados que son, ocasionalmente, distintos.
Boca asumirá tres competencias durante el primer semestre del año, con la Libertadores como premisa central. Pero el primer partido oficial del año lo tendrá el jueves 2 con el duelo que asumirá con Santamarina de Tandil, en Salta, por los 32vos. de final de la Copa Argentina.
Por su lado, River tiene otra preocupación en mente. Almeyda y sus dirigidos pretenden regresar al círculo privilegiado del fútbol local lo más rápido posible. Y el próximo encuentro oficial será ante Almirante Brown, en Isidro Casanova, el sábado 5 de febrero.
Probables formaciones.
River: Daniel Vega; Luciano Abecasis, Jonatan Maidana, Ramiro Funes Mori y Juan Manuel Díaz; Carlos Sánchez, Ezequiel Cirigliano, Leonardo Ponzio o César González; Alejandro Domínguez; Fernando Cavenaghi y Rogelio Funes Mori o David Trezeguet. Dt: Matías Almeyda.
Boca: Agustín Orión; Franco Sosa, Rolando Schiavi, Juan Manuel Insaurralde y Facundo Roncaglia; Pablo Ledesma, Leandro Somoza y Nicolás Colazo; Cristian Chávez; Pablo Mouche y Nicolás Blandi. Dt: Julio Falcioni.
Arbitro: Diego Abal.
Estadio: Sarmiento de Resistencia (Chaco).
Hora de inicio: 22.10