Fue luego de que un grupo de 15 personas, entre los que había comerciantes de la zona, patotearan a los manifestantes con machetes y quemaran las barricadas
La ruta 135, que une Colón con Paysandú y que estaba bloqueada por vecinos que se solidarizaron con Gualeguaychú por la instalación de la papelera Botnia quedó despejada después de que unas 15 personas, en su mayoría comerciantes de la zona, se presentaran en el lugar del corte con machetes y bidones de combustibles.
En pocos minutos los bidones quedaron vacíos y las barricadas que servían para marcar el freno al tránsito reducidas a cenizas.
No hubo violencia ni enfrentamiento físico ni heridos. Sí mucha bronca entre los vecinos que querían mantener el corte y los que, enervados, decidieron que ya era demasiado.
Tras la irrupción del grupo, el tránsito quedó absolutamente liberado, por lo que el único puente bloqueado es el de Gualeguaychú, en el que desde hace 90 días es imposible cruzar a Fray Bentos, donde se levanta Botnia.
Ahora la situación en la zona mezcla la calma con la tensión. Es que todos los protagonistas del conflicto siguen a la vera de la ruta: los dos colonenses que hacían guardia en el corte esta mañana cuando irrumpieron los violentos, tres mochileros porteños que llegaron desde Buenos Aires que llegaron al lugar de la protesta para acompañarlos y casi todos los comerciantes que iniciaron los incidentes.
Tendrán que sentarse a discutir a las 19 cuando se reúna la asamblea. Estarán los que quieran volver al corte por tiempo indeterminado y los comerciante que, aunque apoyan los bloqueos, prefieren volver al antiguo sistema de cortes anunciados y por seis o siete horas.