Tres días duró la alegría de los habitantes de Bariloche por la reapertura del aeropuerto que permitiría la llegada de turistas. Las autoridades locales decidieron este lunes cancelar todos los vuelos a la ciudad rionegrina por la presencia de cenizas volcánicas del Puyehue.

Aerolíneas derivó sus vuelos a Esquel y LAN a Neuquén, en el intento de que puedan partir.

El regreso de las cenizas generó la suspensión de las partidas desde Bariloche, lo que había comenzado a movilizar turismo hasta localidades del sur argentino, profundamente castigadas por el efecto del volcán chileno.