El represor Alfredo Astiz "negó las imputaciones" que se le hacen en relación a los crímenes de las monjas francesas Leonie Duquet y Alice Domon, la fundadora de Madres de Plaza de Mayo Azucena Villaflor y otras tres mujeres familiares de desaparecidos.

Fue ante el juez Sergio Torres, quien esta mañana le amplió su indagatoria en el marco de la megacausa ESMA.

El destituido capitán de fragata de la Armada, de 56 años, prestó declaración indagatoria durante casi tres horas, durante las cuáles "compulsó la causa" junto a su abogado defensor, Juan Aberg Cobo, y luego "ofreció medidas de prueba", algo que la querella consideró como "medidas delatorias".

La audiencia finalizó minutos antes de las 12 y Astiz fue trasladado nuevamente a la base naval de la localidad bonaerense de Zárate, donde cumple prisión preventiva.

Fue la primera vez que el represor declaró en una causa por su actuación durante la dictadura.