La autoridad monetaria brasileña salió a anunciar una importante operación en el mercado cambiario por un monto de al menos u$s 2.716 millones. No alcanzó
El Banco Central de Brasil anunció una importante operación en el mercado cambiario por un monto de al menos u$s 2.716 millones.
La noticia impactó en la plaza y el real, que se devaluaba casi 5% y llegó a cotizar a R$ 1,95 por dólar, pasó a revaluarse más de 1% hasta bajar a R$ 1,846, lo que llevó algo de tranquilidad a la plaza cambiaria.
Pero luego la divisa brasileña retomó la tendencia inicial y culminó con una depreciación de 1,6% para cerrar a R$ 1,895. El Banco Central de Brasil intervino, pero no pudo frenar la caída del Real y el Bovespa.
La bolsa y la moneda brasileñas cayeron con fuerza en una jornada en que los inversores de todo el planeta se desprendieron de los activos de riesgo por temores a una nueva recesión global.
El índice referencial de la Bolsa de Valores de San Pablo, el Bovespa, se hundió un 4,83 por ciento y terminó en 53.280,28 puntos, registrando un descenso por cuarta sesión consecutiva, con una pérdida acumulada de un 6,9 por ciento en la semana.
El real, en tanto, se depreció 1,6 por ciento, cotizando a 1,8945 unidades por dólar en el mercado interbancario, su mínimo nivel de cierre desde septiembre del 2009, luego de una sesión volátil.
La moneda redujo mayores pérdidas iniciales tras la intervención del Banco Central en el mercado cambiario mediante una subasta de swaps cambiarios reversos.
En su mínimo umbral intradiario, el real llegó a desvalorizarse un 5 por ciento, cotizando a 1,95 unidades por dólares, un nivel no visto desde julio del 2009.
La autoridad monetaria vendió el equivalente a 2.750 millones de dólares en el mercado futuro para anticipar el vencimiento de contratos de swaps cambiarios reversos que fueron usados a comienzos de año como parte de la estrategia para frenar la valorización del real ante el dólar.
En la tarde, el Banco Central informó a través de un comunicado que "podrá volver a actuar en cualquier momento, de modo de asegurar las condiciones apropiadas de liquidez en los mercados de cambio".
"Lo más importante es que el mercado sintió que el Banco Central quiere colocar una banda (cambiaria). Es como si dijera: 'mira, 1,60 (reales) no quiero, pero tampoco voy a dejar 1,90'", dijo el operador de cambio de la correduría Interbolsa Moacir Marcos Júnior.
El escenario negativo siguió en el centro de la atención de los inversores, principalmente después del comunicado de la Reserva Federal estadounidense el miércoles, en que alertó sobre el riesgo "significativo" para la economía de Estados Unidos.
El operador de renta variable de la correduría Hencorp Commcor Rafael Dornaus consideró que existe una aversión "generalizada" al riesgo en el mercado y recordó que la única medida anunciada por el Fed ya era esperada.
"La percepción es que la 'Operation Twist' ya había sido añadida al precio y la Fed anunció sólo eso en el comunicado, dio una rebaja a la perspectiva económica y no se propuso hacer nada más", remarcó.
"La discusión en Grecia (sobre el riesgo de cesación de pagos) sigue en el foco, pero lo que más influye es la presión en los bancos", agregó Dornaus.
Ninguna de las acciones que componen el principal índice de la bolsa paulista registró avances. Los títulos que más cayeron fueron los del frigorífico Marfrig , que se desplomaron un 8,84 por ciento.
Entre las acciones más negociadas en el Bovespa, las del gigante minero Vale perdieron un 4,3 por ciento, a 41,58 reales, mientras que las de la petrolera estatal Petrobras retrocedieron un 5,34 por ciento, a 19,50 reales.