La mamá de la nena de 11 años analizó qué mataron a su hija porque "se asustaron. No pensaban que yo iba a hacer tanto". Desvinculó al marido
"La noticia peor ya pasó", aseguró con razón Carola Labrador, mientras ahora todo gira en torno a la investigación para dar con los asesinos de su hija, Candela Sol Rodríguez.
La madre de la pequeña sostuvo además que va a continuar con la búsqueda de los responsables del atroz asesinato: "No voy a parar hasta que me traigan al verdadero culpable", concluyó.
Sin embargo, la madre de la víctima desestimó ante la prensa las hipótesis que señalan los vínculos de su familia con diversos delitos, como el robo, los piratas del asfalto y el narcotráfico.
"Están inventando porque no tienen qué decir", aseguró. Y añadió: "Mi marido no tiene nada que ver".
El jueves fue un día muy duro para Carola, luego de comprobar la muerte de su hija vivió las peores horas de dolor, al despedir los restos de la pequeña.
Por la tarde se informó que Labrador no pasaría la noche en su casa, tal como sucedió.
"Estuvieron diciendo que yo me fui. Fui a llorar a mi hija, porque no la pude enterrar tranquila, me volvieron loca", se quejó.