El 78 por ciento de los empresarios consultados prevé una situación económica positiva o igual en este semestre, mientras que más de la mitad espera un incremento en las ventas, según la encuesta de Expectativas de Ejecutivos presentada hoy por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA).
El trabajo también arrojó que la incertidumbre electoral no está afectando al mundo de los negocios y por ello existe una menor volatilidad en la economía.

El 47 por ciento de los ejecutivos de empresas consultados en junio dijo esperar que las ventas aumenten en forma moderada durante este semestre, mientras que otro 5 por ciento estimó que se incrementarán "significativamente".

La tradicional encuesta de IDEA, que engloba a las principales compañías del país, es una muy buena muestra de lo que piensa el sector privado en la Argentina, ya que se estima que allí está representado el 75 por ciento del Producto Bruto del país.

Los empresarios también coincidieron en que uno de los principales desafíos una vez obtenida la estabilidad económica es ver cómo aprovechar mejor la mayor demanda, explicó Eduardo D´Dalessio, responsable de la encuesta realizada on line entre 275 ejecutivos argentinos, quien la presentó junto al economista Dante
Sica.

El sondeo -que se hizo de cara al 47 Coloquio que IDEA realizará en Mar del Plata entre el 12 y el 14 de octubre próximo- reflejó una evaluación favorable de la situación económica en 2011 y expectativa de estabilidad en cuanto a las condiciones actuales.

Entre los desafíos mencionados por los empresarios se destaca la necesidad de "mantener rentabilidad en un contexto de aumento de costos por encima de los precios" y hay cuestionamientos hacia la elevada "presión fiscal".

D´Alessio indicó que "pasada la crisis internacional de 2008/2009, la percepción de la economía vuelve a la calma", mientras que los recientes desajustes económicos en Estados Unidos y varios países europeos "no opacan esta sensación".

Los empresarios esperan que se mantengan en condiciones de equilibrio exportaciones, inversión y empleos.
La encuesta arrojó que el desafío que presenta el 2011 es generar nuevas estrategias para sacar provecho al mercado existente, en particular, la diversificación de productos y servicios.

Una de las principales preocupaciones en el sector privado está vinculada con un aumento de costos que no pudo ser trasladado en su totalidad a precios.

Así, a pesar de que desde el gobierno se acusa a los "remarcadores de precios" por la inflación", la mitad de las empresas dijo que se ha visto imposibilitada de trasladar en forma completa los incrementos en lo destinado a la mano de obra hacia los aumentos en los precios.

El 56 por ciento de los ejecutivos consultados dijo que su compañía no pudo aumentar sus precios en línea con el aumento del costo de la mano de obra.

Por su parte, Sica explicó que, según la encuesta, "continúa altamente comprometida la capacidad de producción: 8 de cada 10 empresas están funcionando a más del 71 por ciento de su capacidad"

El estudio detectó, además, una tendencia decreciente de remisión de utilidades a casa matriz.

El 46 por ciento de los consultados informó que ya no remite utilidades hacia sus casas matrices, un fenómeno que estaría vinculado con los controles cada vez más severos aplicados por el gobierno para evitar la salida de capitales.