La cadena del grupo Ilhsa no alcanzó los objetivos esperados. Dicen que a los empleados los reubicarán. Sus dueños se concentran en las librerías Yenny y El Ateneo
La cadena de disquerías y artículos de electrónica Dromo decidió cerrar sus puertas ya que el negocio no cumplió las expectativas del grupo inversor, afectado por la piratería y el auge de la venta musical por internet.
Dromo era propiedad de Inversora Librera Holding (Ilhsa), de la familia Grüneisen, que decidió concentrarse en sus otros emprendimientos, las librerías Tenny y El Ateneo.
Los locales Dromo de calle Florida y el shopping Unicenter ya cerraron sus puertas, y en los próximos días ocurrirá lo mismo con sus otras tres sucursales, sobre las avenidas Santa Fe y Cabildo, y en el centro comercial Alto Rosario.
En Ilhsa dijeron que la empresa decidió concentrar sus esfuerzos en su negocio principal de librerías, que también ofrecen la venta de discos.
Ante la preocupación de los empleados, en la compañía precisaron que algunos de los locales donde funcionaba Dromo serán reconvertidos en sucursales de Yenny y El Ateneo.
Pero la mayor parte de los trabajadores pasará a trabajar en la cadena Garbarino, a partir de un reciente acuerdo cerrado entre las dos compañías.