El ex embajador de Estados Unidos en la Argentina James Richard Cheek falleció a los 75 años en dicho país, se informó. Era fanático de San Lorenzo
"La Embajada de los Estados Unidos en Argentina tiene el triste deber de informar el fallecimiento del ex embajador de Estados Unidos en Argentina, James Richard Cheek", señaló en un comunicado. Cheek fue embajador de Estados Unidos en Argentina entre el 19 de julio de 1993 y el 18 de diciembre 1996, destacó ese cuerpo diplomático.
Destacó que el diplomático era "oriundo de Arkansas" y que "se unió al Departamento de Estado en 1962, sirviendo en numerosos destinos en América, Africa y Asia". "Los familiares han solicitado que en vez de flores, las personas interesadas en realizar donaciones las dirijan a la Organización Heifer International, 1 World Ave, Little Rock, Arkansas 72202", se informó.
Ícono de las "relaciones carnales" entre Argentina y Estados Unidos durante el menemismo, Cheek fue también, a su modo, un personaje local. Le gustaba rodearse de celebridades: cultivó una amistad con Marcelo Tinelli, con quien compartía su pasión por San Lorenzo.
Tal era su pasión por el Ciclón que llegó a afirmar, después del atentado del World Trade Center el 11 de septiembre de 2001, que Osama Bin Laden era "hincha de Huracán", el clásico rival del club.
Cheek quedó en el imaginario popular cuando la tortuga que tenía como mascota se perdió en una estancia cordobesa durante una convención de banqueros. Ocurrió el 22 de agosto de 1993 y el embajador puso a la CIA, el FBI y la SIDE a buscar al animal, que apareció dos días después. La frase quedó luego inmortalizada como sinónimo de falta de atención cuando Maradona comentó que a Macri "se le escapó la tortuga".