La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien durante un acto la semana pasada había admitido que venía "medio bajoneada", suspendió las actividades que tenía previstas para este lunes y extendió su estadía en Santa Cruz.

Lo confirmó la oficina de prensa de la Casa Rosada, que no dio explicaciones sobre las razones.

La decisión disparó una serie de rumores, alentados aún más por el reconocimiento realizado por la jefa de Estado en un acto la semana pasada de que atraviesa un momento anímico complicado.

"Vengo bajoneada", había reconocido Cristina, quien extraña cada vez más a su compañero de toda la vida, Néstor Kirchner, fallecido el 27 de octubre del 2010.

En un acto realizado el 5 de mayo último en San Martín, la jefa de Estado había agradecido el permanente apoyo y sorprendido a su auditorio al admitir: "Andaba medio pum para abajo".

La baja presión y las versiones nunca desmentidas de que la jefa de Estado padece un leve cuadro de depresión, que se profundizó tras perder a su esposo, explican parte de las versiones que circulan en la Rosada y reflejan la preocupación del kirchnerismo por su candidatura presidencial, la única que garantizaría un triunfo en primera vuelta.

La jefa de Estado tenía previsto reuniones con la UOCRA y CAME, las cuales fueron pospuestas inicialmente para este martes.