El ministro de Seguridad dijo que investigan a "cualquier tipo de recurso policial exonerado o separado de la fuerza o vinculado con la época de la represión"
El ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian, negó este viernes haber tenido conocimiento de denuncias de intimidación contra Luis Gerez, el testigo que acusó por torturas al ex comisario Luis Patti y colaboró para que no asumiera su banca en Diputados.
Desde el miércoles, Gerez está desaparecido y en la investigación se apunta a "cualquier tipo de recurso policial exonerado o separado de la fuerza o vinculado con la época de la represión".
"En ese abanico, entra todo", manifestó Arslanian, quien consideró también –y en vistas de los 100 días que lleva desaparecido Jorge Julio López, testigo clave en la causa Etchecolatz- como "conveniente" y "necesaria" una estrategia de "concentración" de causas contra represores de la última dictadura.
De ese modo, según Arslanian, se conseguiría que los que tengan que declarar "lo hagan una sola vez" y eso posibilite "un cuidado mayor de los testigos".
Arslanian afirmó que todavía no tenían "elementos concretos" sobre el paradero de Gerez, aunque sostuvo que la investigación se encuentra en "sus primeros momentos" y que, por ende, confiaba en que las pesquisas lleven "a buen puerto".
Por estas horas, e fectivos de la Policía Bonaerense y de Gendarmería Nacional intensifican la búsqueda y realizan un amplio operativo en el partido de Escobar. Los controles incluyen la detención de numerosos automóviles y camiones, la verificación de documentación y la inspección de su interior. También revisan vehículos en los accesos a otras localidades de la zona como Ingeniero Maschwitz y Del Viso.
El operativo comenzó a desplegarse poco antes de la medianoche, después de una inusual visita que hizo ministro del Interior, Aníbal Fernández, a la Unidad Federal de Investigaciones de Escobar.
La desaparición de Gerez conmociona a los gobiernos nacional y provincial, que durante todo el día de ayer siguieron de cerca el tema y hasta comandaron por momentos la búsqueda. El propio presidente Néstor Kirchner, que hoy seguía desde la residencia de Olivos las novedades del caso , mantuvo reuniones con el gobernador Felipe Solá. Desde el Ejecutivo dijeron que interpretaban la desaparición como "un mensaje cuasimafioso" vinculado a la derogación de las leyes de impunidad.