La presidenta sufrió una baja de su presión arterial y los médicos le recomendaron hacer descansar 24 horas. Es un problema recurrente en la salud presidencial
La salud volvió a jugarle una mala pasada a la presidenta Cristina Fernández.
La jefa de Estado debió suspender su agenda por 24 horas luego de sufrir de que se mareó y los médicos detectaron una baja en su presión arterial.
La Presidenta fue trasladada a Olivos donde permanecerá en reposo.
La Unidad Médica Presidencial informó que "la señora Presidenta de la Nación presentó en la fecha un cuadro de hipotensión arterial, por el cual se le indicó reposo por 24 horas, continuando con control evolutivo".
Si bien toda la agenda de este martes fue suspendida, el viaje oficial a México previsto para el miércoles "está en pie".
El problema de salud obligó a la mandatario a suspender su encuentro con el gobernador salteño reelecto, Juan Manuel Urtubey.