La ministra de Defensa, Nilda Garré, anticipó que el Gobierno se constituirá en querellante de la causa por la explosión de la fábrica militar de Río Tercero con el objetivo de ejercer "un control" sobre la investigación.

Garré formuló el anticipo tras reunirse con el presidente Néstor Kirchner, aunque aclaró que no habló del tema con el jefe de Estado y dijo que el anuncio oficial se realizaría el miércoles.

La presentación será efectuada ante la justicia cordobesa por el Ministerio de Defensa, y según agregó Garré: "Es para impulsar una causa que quedó estancada por un fallo sin precedentes", en referencia a la absolución de seis oficiales del Ejército decidida por el conjuez Diego Estévez.

"Siempre quisimos que la causa progresara...hace un tiempo no parecía necesaria la presencia del Ministerio pero ahora decidimos que sí, y queremos ser parte querellante", agregó la titular de Defensa durante una conferencia de prensa en Casa de Gobierno.

La posibilidad que el Estado se presente como querellante tras el polémico fallo había sido adelantada por la propia Garré, quien calificó la explosión de la Fábrica como "un hecho intencional".

"Fue el hecho más monstruoso de los 90, más, incluso, que el de la AMIA; no en cantidad de muertos, pero sí en cuanto a lo inconcebible de que funcionarios del Estado nacional, para tapar un delito, hicieran una voladura intencional de un polvorín", aseguró la titular de Defensa en declaraciones a un diario cordobés.

Casi al mismo tiempo, el Gobierno lanzó una ofensiva para que el Poder Judicial de Córdoba sancione a Estévez. Al respecto, la Cámara Federal de esa provincia alargó el suspenso y dejó para el jueves su decisión sobre el caso.