El presidente de Boca dijo que el ídolo de la entidad bien podría calzarse el buzo y estar "una década" en el banquillo de la Bombonera. El "melli" por ahora solo juega
Se sabe que al presidente de Boca Mauricio Macri le gustan las apuestas fuertes y los riesgos en materia futbolística, por eso no sorprendió cuando tras la renuncia de Ricardo La Volpe le ofreció al mellizo Guillermo Barros Schelotto ser él el técnico auriazul.
Sin embargo, Guillermo le agradeció el convite, pero le dijo que al menos quería jugar seis meses más en el equipo titular, por lo que se produjo la llegada de Miguel Angel Russo a la entidad de la Ribera.
"Siempre lo hablo con él. Yo le dije que, para mí, Barros Schelotto debe ser el DT de Boca durante diez años. Mi sueño era ponerlo antes de que termine mi período (diciembre de 2007), pero se ve que no lo vamos a lograr", le dijo Macri al diario "La Nación".
Asimismo, aclaró que él entendió la postura de Guillermo desde el momento en que "todos todos queremos jugar en Boca".
"Yo cambiaría mi vida por ser Guillermo o (Martín) Palermo, pero también hay aviones que pasan una sola vez en la vida, ¿no?", señaló de manera más que explícita.
Consultado para cuándo vería al mellizo como DT de Boca, Macri disparó: "Para 2008. Ese debería ser el año de Guillermo".
"El (por Barros Schelotto) es un símbolo de Boca. En esta época moderna, que un jugador esté once años en un mismo equipo es increíble. Es como haber vuelto a la época de Antonio Rattín. El Mellizo tiene un valor especial. Además, él demostró su inteligencia y se hizo más ídolo todavía como suplente. Porque los hinchas de Boca valoramos su humildad. Boca es tan importante que si no te toca jugar, te la tenés que bancar", expresó.
Desde que llegó a Boca -en 1997 proveniente de Gimnasia-, Guillermo Barros Schelotto ganó 15 títulos, tanto a nivel nacional, como internacional.