Una persona murió y otra resultó herida en el incidente que se produjo en un sumergible británico de propulsión nuclear, en un extraño episodio que se registró en Southampton
Un tripulante muerto y uno herido muy grave es el balance de un extraño tiroteo ocurrido ayer a bordo del submarino británico de propulsión nuclear Astute, que se encontraba en ese momento fondeado en una escala de cinco días en el puerto de Southampton, sur de Inglaterra.
Un tercer tripulante fue detenido por la policía, llamada al lugar de los hechos poco después de mediodía, una hora más en la España peninsular. La policía no ha dado ningún detalle de las circunstancias del incidente pero ha asegurado que no se trata de un atentado terrorista y que ninguno de los visitantes civiles que había en ese momento a bordo han corrido peligro.
En ese momento estaba visitando el submarino una delegación del ayuntamiento local encabezada por el concejal que lidera el Gobierno local y por la alcaldesa mayor, un cargo honorífico rotatorio. El mutismo de las autoridades impide saber si se ha tratado de un accidente, si el tiroteo ha sido producto de una riña o si se trata de un caso de enajenación mental transitoria. Ayer tarde aún no se había revelado la identidad de los tres tripulantes afectados, de los que se cree que al menos el fallecido y el herido tienen rango de oficial, porque sus familiares todavía no habían sido informados.
Según algunos medios, todo ocurrió en la sala de control del submarino. Pese a estar propulsado con energía nuclear, la policía aseguró que el incidente no ha supuesto ningún riesgo para la población. Al generar su propia energía y purificar el aire y el agua que consume, el Astute puede navegar sin límites. Pero sólo puede cargar alimentos para tres meses para sus 98 tripulantes. El año pasado protagonizó un incidente al encallar mientras navegaba frente a la isla de Skye, en Escocia, en marea baja. El submarino acabó chocando contra el barco que había acudido en su rescate.