Por el fuerte crecimiento del negocio móvil y la banda ancha, el grupo Telecom Argentina registró en 2010 ventas por $ 14.679 millones, un 20% más que en 2009. Las utilidades netas de la empresa alcanzaron los $ 1821 millones, un 30% más que el año anterior. En 2010, la empresa pagó impuestos por $ 1000 millones, repartió dividendos del ejercicio anterior por 1053 millones y cerró su primer ejercicio sin deuda en muchos años. De hecho, cerró el año con 1224 millones de saldo positivo de caja, toda una novedad en la empresa, que en 2002 declaró el mayor default privado de la Argentina por US$ 3250 millones.

El máximo ejecutivo de la empresa, Franco Bertone, presentó ayer los resultados del último año y anunció que en 2011 la empresa, controlada por Telecom Italia y con participación de la familia Werthein, prevé inversiones por $ 2500 millones. La compañía, como sus principales competidores en el mercado local, espera con ansiedad la licitación de espectro que prevé hacer la administración Kirchner en los próximos meses.

En esa licitación podrían competir nuevos jugadores, como Telecentro (familia Pierri), que recientemente obtuvo la licencia del Gobierno para dar ese servicio. Con 130 líneas por habitante, la Argentina es el segundo país de la región en penetración del servicio, sólo superada por Uruguay, con 135.

El año pasado, Personal, la telefonía móvil de Telecom, tuvo ventas por 9501, un 25% más que en 2009. El 65% de los ingresos por ventas de todo el grupo se generan en su operación móvil, que superó los 16 millones de clientes. "En telefonía móvil, cuatro de cada 10 pesos corresponden a servicios de valor agregado. La Argentina es un mercado muy maduro en servicios móviles, por lo que el crecimiento se va a dar no tanto en la base de clientes como en la venta de servicios adicionales", detalló Bertone. Eso también explica que el gasto promedio por cliente (conocido en la jerga del sector como ARPU) haya aumentado 14% en la cartera de Personal.

Arnet, la empresa proveedora de Internet de banda ancha del grupo, tuvo ventas por $ 1374 millones en 2010, un 30% más que en 2009. Bertone reconoció que durante el primer semestre Arnet no tuvo un buen desempeño y argumentó que la recuperación de la segunda parte del año se debió a la promoción vigente que combina acceso a Internet fija y móvil en un mismo combo.

Consultado acerca del impacto en el mercado del caso Fibertel (cuya caducidad de licencia está frenada en la Justicia), Bertone reconoció que ese competidor (propiedad de Cablevisión, empresa del grupo Clarín) mantuvo su posición. Según el directivo, los abonados a la banda ancha en la Argentina se reparten "34 por ciento para Arnet, 35 por ciento para Speedy (Telefónica) y 31 por ciento para Fibertel".

Telecom Argentina atraviesa sus primeros meses de paz luego de varios años de enfrentamiento entre sus accionistas y de sufrir los embates de la administración Kirchner, que, por medio del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, intentó quedarse con el control de la compañía. Las disputas comenzaron a zanjarse en agosto, cuando sus accionistas llegaron a un acuerdo y sellaron la paz, y terminaron de superarse cuando en octubre el Gobierno autorizó el ingreso de Telefónica (su principal competidor local), por medio de Telecom Italia, en el paquete accionario de la compañía a cambio de una serie de compromisos "antimonopolio".

Según Bertone, los buenos números de Telecom responden "al efecto Argentina, al efecto del acuerdo de accionistas, y a los resultados positivos de la empresa". Con una dotación de 15.600 empleados, Telecom es uno de los mayores empleadores de la Argentina.