Dejó su cargo en la Unión Industrial frente a la disconformidad de cómo se manejó el asunto de su sucesión al trascender públicamente las diferencias internas
A menos de dos meses de que concluya la presidencia de Héctor Méndez al frente de la UIA, el titular renunció a su cargo, según dijeron voceros de la entidad, aunque, clararon que no se trata de una dimisión indeclinable.
Asimismo señalaron, según pudo saber La Nación, que se espera para esta tarde una reunión en la sede de la central fabril para tratar el tema.
La decisión fue trasmitida por Méndez a través de una carta en la cual estableció que los motivos de su renuncia fue el descontento frente a las diferencias internas respecto a su sucesión que se hicieron pública y que consideró que no debían trascender.
Además, ayer se realizó una reunión entre los directivos de la entidad de la cual salió angustiado y disconforme, quizá el motivo disparador de su repentina renuncia.
En las últimas semanas, comenzó un fuerte debate en la entidad fabril por la sucesión de Méndez. Un grupo conformado por unos cinco empresarios abrió el debate en cuanto a la posibilidad de llamar a elecciones internas abiertas en la entidad, algo que no ocurre desde 2003. Ese año, las dos corrientes principales, la Celeste y Blanca e Industriales, se pusieron de acuerdo para alternarse en el poder cada dos años. Por eso no se habla de elecciones sino que se trata de una renovación de autoridades.
Méndez pertenece a la corriente Celeste y Blanca, que cederá el poder. En el Grupo industriales, la otra parte del acuerdo actualmente cuestionado, se encuentra, por ejemplo, Luis Betnaza, Director de Techint.
El debate en torno de la apertura a elecciones o la continuidad del acuerdo tiene un punto adicional: hay quienes sospechan que un llamado a elecciones alentaría la entrada de operadores oficialistas, para dividir a un sector que, desde hace al menos un año, le es hostil.
En los años de vigencia del acuerdo, el sucesor solía ser designado en diciembre, con cuatro meses de antelación. Pero esta vez, no había sido electo.