La televisión estatal iraní transmitió un "documental" en el que Sakineh Ashtiani, la mujer condenada a la lapidación, muestra cómo "mató" a su esposo.

Para eso fue sacada de la cárcel y llevada a su propia casa, en un acto confusamente interpretado como una liberación por una ONG alemana.

Ya se transmite un anticipo de lo que será la emisión de esta noche, en el cual un funcionario judicial explica: "Desde el año pasado, ciertas personas alejan este expediente de su recorrido legal para convertirlo en un caso político".

A continuación, la propia Sakineh declara: "Hemos planificado la forma de asesinar a mi marido". Lo dice en persa.

Los defensores de la mujer aseguran que ella sólo habla azerí. Luego se ven escenas del crimen: la "asesina" con una jeringa en la mano y preparando la electrocución de su esposo.

Sakineh fue condenada a morir apedreada por el "delito" de adulterio. A posteriori, y como respuesta a la campaña internacional en su favor, el régimen alegó que en realidad estaba sentenciada por complicidad en el asesinato de su marido, lo que desmienten los expedientes del caso.

En el intento de fortalecer esta versión, el régimen presenta ahora la confesión de una Sakineh que, además, "actúa" ante las cámaras el delito cometido.

Normalmente la reconstrucción de un crimen se realiza durante la investigación. El hecho de que se haga ahora revela la intención propagandística de las autoridades iraníes, según analistas occidentales.