De la Redacción de Asteriscos.Tv

El corazón de los argentinos se detuvo en aquel inolvidable noveno round cuando Oscar "Ringo" Bonavena llegó a la cima de su carrera deportiva cuando tuvo a sus pies al más grande boxeador de la historia, Muhammad Alí en el memorable combate que se disputó en el Madison Square Garden de Nueva York.

En es novena vuelta el "bocón" de Alí había anunciado que tiraría al argentino, quien fue un excelente partenaire del show de provocaciones, y todo fue al revés, al terminar sentado en la lona por algunos segundos --tras resbalarse-- el entonces ex campeón mundial de los peso Pesados.

En ese duelo, del cual se cumplen este 7 de diciembre 40 años, no hubo título en juego, aunque para Bonavena era determinante en su campaña deportiva.

El país se paralizó aquella noche en la Argentina mirando el combate por los viejos televisores en blanco y negro y fue un momento muy emotivo cuando Ringo estuvo a punto de derrotar al púgil mas extraordinario de la historia.

Con mucha guapeza, el argentino, en una pelea sin título en juego, pero que igual se disputó a 15 vueltas, soportó los embates finales de Alí quien en el decimoquinto round tiró tres veces al argentino y se quedó parado a su lado, sin respetar el reglamento de ir al rincón más lejano y así no le dio tregua a Bonavena.

Enfrentarse a Muhammad Alí, el mejor boxeador del mundo, y no hacer el ridículo era el objetivo de Oscar "Ringo" Bonavena, un muchacho de barrio que llegó más lejos de lo esperado.

A esa altura, inicios de los 70, el púgil porteño había logrado cierto reconocimiento en Estados Unidos. Para Alí, Bonavena era un escalón más en su objetivo de recuperar la corona de los pesados, y hasta vaticinó un nocaut en el noveno round.

Sin embargo, "Ringo" apeló a toda su verborragia para calentar el ambiente. Llamó "chicken" (gallina) a Alí y también se refería a él como Cassius Clay, cuando el norteamericano ya era musulmán.

Aquí la presentación de Bonavena paralizó a todo el país, y los 80 puntos de rating que consiguió Canal 13 la convirtieron en uno de los sucesos deportivos más importantes de la historia. En tanto, unas 20.000 personas colmaron el Madison Square Garden.

En el noveno round, que supuestamente iba a ser el de la definición, quien cayó a la lona fue Alí, aunque producto de un resbalón y no de un golpe neto de Bonavena.

Sin embargo, la fotografía de esa escena, con "Ringo" en posición dominante y su oponente caído, quedó marcada como una postal del deporte nacional.

A pesar de esa situación, Alí seguía al frente en las tarjetas y en la última vuelta Bonavena salió a jugarse el resto.

No acertó, y ya fatigado cayó tres veces. Perdió por nocaut técnico. "Guapié (sic), ¿no es cierto?", le preguntó a uno de sus colaboradores camino al vestuario.

Si, Ringo, lo hiciste.