La violencia no se detiene en Irak.

Este martes se registró otra jornada de atentados que dejó un saldo provisorio de más de 30 muertos.

En el primero, catorce empleados de un organismo religioso shiíta fueron asesinados en un atentado con coche bomba y luego un tiroteo contra el micro en que viajaban, en el norte de Bagdad.

Un coche bomba estalló al paso de un micro que transportaba empleados del Waqf (organismo encargado de los bienes religiosos) shiíta. Luego hombres armados hicieron fuego", indicó la fuente.
"Catorce personas fueron muertas en este ataque, que se produjo en el barrio de Waziriya, al norte de Bagdad", agregó.

En tanto, al menos 16 personas murieron hoy y otras 25 resultaron heridas al explotar tres coches bomba de manera casi simultánea junto a una estación de gasolina en el sur de Bagdad, según fuentes policiales iraquíes.

Las fuentes explicaron que los tres vehículos estaban estacionados junto a la gasolinera cuando estallaron, lo que afectó a numerosos coches y personas que se habían acercado a la estación para conseguir combustible.

Las fuentes explicaron que el número de muertos y heridos podría aumentar debido a que el estado de algunos heridos es grave y las ambulancias continúan llegando al lugar de las explosiones.