Otra vez David
Una vez más, para que nadie pueda pensar que es casualidad, Nalbandian demostró que es un jugador al que la Copa Davis le sienta muy bien
1 de diciembre de 2006
Por Diego Provenzano
Como ante Lleyton Hewitt en el césped australiano, o con Dominik Hrbaty en la hostil Eslovaquia, el oriundo de Unquillo se convirtió en el temible jugador al que nadie quiere enfrentar cuando se trata del certamen ecuménico.
El encuentro arrancó con una gran demostración de tenis de ambos lados, y con Safin metiendo cuatro aces en ese primer game, donde pasó de todo, y David pudo quebrar.
Pero además del que se disputaba sobre la carpeta del estadio moscovita, la gente pasó a tener un papel protagónico en el juego.
La fórmula de David fue, desde un primer momento, utilizar el famoso
"limpiaparabrisas", moviendo al ruso de un lado para otro de la cancha.
Además, acompañaba cada uno de sus tiros con cambios de ritmo, que también se veian en el saque, una faceta que presentaba incógnita antes del inicio de la serie, por lo mostrado en el Masters de Shangai, hace dos semanas.
David llegó 5-4 con la responsabilidad de cerrar el set, y con más ganas de cerrarlo que nadie, ya que quedó 40-0 arriba y con un fenomenal revés paralelo lo logró.
Safin no se iba a quedar quieto, porque por temperamento, es de esos a los que no le gusta ni un poco perder, y menos por Copa Davis, y menos que menos como local, algo que no pasaba desde 2002, cuando cayó frente a Roger Federer.
Sin embargo, Nalbandian mantuvo su estrategia y siguió siendo el protagonista del juego, que se volvió más espectacular con puntos disputados con una técnica envidiable.
Otra vez en el inicio, Nalbandian quebró el servicio del anfitrión para ponerse 2-1 y empezar a ver la realidad de una victoria.
Volvió a romper el servicio del local y pasó a ganar 4-1, y aunque Safin reaccionó y descontó en el 5-3, el rumbo del set no cambió.
El argentino tuvo la cabeza fría y no enloqueció con las bombas que venían desde el otro lado de la cancha, y con una difícil volea de revés, que hizo fácil, cerró el capítulo.
Era el momento de apretar el acelerador, y Nalbandian lo hizo. Con la táctica antes mencionada, Safin se fue desgastando en lo físico.
Una serie de errores con el saque del ruso, le abrieron la puerta al triunfo a David, que se quedó con el codiciado séptimo game, y se encaminó a una victoria trabajosa, pero que fue contundente y totalmente justa.
Nalbandian cerró el juego con un ace desde el segundo saque, y con eso, uno de los mejores partidos de su carrera, que como plus, le dio el empate a la Argentina en la Davis.
Ahora, el partido de dobles de mañana toma vital importancia, tal como lo habían presagiado los protagonistas, durante los días previos.
Los cordobeses Nalbandian y Agustín Calleri intentarán sacar ventaja ante Dmitry Tursunov y Mikhail Youzhny, a partir de las 8:00 (hora argentina) y con transmisión en directo por TyC Sports.