Por Diego Provenzano

Dejando atrás todas las especulaciones realizadas en la previa -discusiones incluidas-, el equipo argentino de Copa Davis comenzará este viernes a transitar el tramo final del camino para cumplir el sueño de levantar la Ensaladera de Plata por primera vez en la historia del tenis vernáculo, cuando enfrente al durísimo seleccionado ruso, en la fría Moscú.

Después de 25 años, un tenista argentino saldrá a la cancha en la serie decisiva. Será Juan Ignacio Chela, el elegido del capitán Alberto Mancini, quien a partir de las 7:00 (hora argentina) chocará con el "afilado" Nikolay Davydenko.

Sobre el "Flaco" de Ciudad Evita recaerá la presión de pelear el primer punto para el combinado nacional, que esperaba un sorteo así.

Después, llegará la hora del esperado partido entre la figura argentina David Nalbandian y Marat Safin, ex número uno del mundo y líder espiritual de los locales.

Dejando de lado lo extra tenístico, el encuentro entre Chela y Davydenko tiene un condimento especial, y es la "paternidad" que tiene el argentino sobre el ruso, que no le pudo ganar en ninguno de los cinco enfrentamientos que mantuvieron.

Sin embargo, hay que tener claras las virtudes del rival: Davydenko fue el mejor tenista de la temporada 2007, detrás de Roger Federer y Rafael Nadal, los dos "superdotados" del circuito.

El ruso (nacido en Ucrania) fue uno de los que más torneos jugó, con 32, llegó a siete finales y conquistó cinco títulos, entre ellos su primer Masters Series, en París-Bercy.

El sábado pasado Nikolay dejó atrás la raqueta por un momento y celebró su casamiento, con la rusa Irina Vasina, en una fiesta que tuvo a todo el plantel local invitado.

Apostillas personales aparte, el encuentro del hombre de Ciudad Evita y el ucraniano promete ser reñido, sabiendo que Chela parece ser un "karma" para Davydenko, que tampoco pudo ganarle en el único choque de esta temporada.

En ese encuentro, disputado bajo el intenso calor de Cincinnati, Chela, número 35 del mundo, derrotó por 6-4; 2-6 y 6-2 al europeo, quien estuvo muy impreciso y no supo nunca quebrar al de Ciudad Evita.

Es que Chela jugó de manera muy inteligente, y no dejó que Davydenko realizara su juego, trantando de moverlo bien desde el fondo de la cancha.

Pelotas profundas, solidez para defender y atacar, y cabeza fría para golpear en los momentos justos: ésa fue la fórmula del "Flaco" para lograr uno de sus mejores triunfos de la temporada.

Es cierto que ahora la superficie será distinta. En esta carpeta, montada sobre madera, la pelota pica mucho más bajo y sale despedida con mayor velocidad.

Pero es Copa Davis, y acá todo puede pasar.

Por eso, tampoco es previsible el choque entre Nalbandian y Safin, que como dijo el presidente de la Asociación Argentina de Tenis, Enrique Morea, "es un jugador que estando bien, puede ganarle a (Roger) Federer".

La experiencia, en este caso, es mucho más grata para el argentino, a pesar de que en el historial sólo haya derrotado al ruso dos veces, sobre ocho enfrentamientos.

Sin embargo, también existe un recuerdo cercano feliz para el unquillense, en el Masters Series de Madrid, hace poco más de dos meses.

Nalbandian tendrá que estar muy fino defensivamente, y no desaprovechar las oportunidades que se le presenten para neutralizar el saque de Safin, una de las principales armas en el arsenal del ruso.

Safin también tratará de poner en juego su revés a dos manos, que cuando cruza de izquierda a derecha, suele hacer mucho daño sobre los rivales.

Las virtudes de David son conocidas, su perseverancia ante cada punto, la solidez desde el fondo de la cancha, y la buena performance en la temporada, ya que se pudo mantener entre los top ten siendo uno de los que menos torneos disputó.

Llega la hora de la verdad, todos los análisis previos quedan fuera del court, donde dos integrantes de cada equipo intentarán dejar todo para darle sus primeros puntos, y tratar de quedar cerca de la codiciada Ensaladera.