Luego de que el BM le entregara un crédito a la papelera Botnia, los asambleístas de Gualeguaychú ratificaron el piquete en la ruta 136 y recibieron donaciones
El conflicto con Uruguay, lejos de resolverse, se intensifica cada vez más.
Después del golpe que significó el anuncio del Banco Mundial sobre el crédito a la papelera Botnia, que no por previsible fue menos duro, los asambleístas de Gualeguaychú redoblaron la apuesta por el corte de la ruta 136 para protestar contra la instalación de la planta en la ciudad vecina de Fray Bentos.
Comenzaron a llegar donaciones para "hacer el aguante" y se barajan varias propuestas para continuar la protesta.
"Ayer comenzaron a llegar donaciones de vecinos y empresas", dijo a la agencia Télam el asambleísta José Pouler, que precisó que recibieron un freezer, litros de agua mineral, toldos y un colectivo en desuso que haga de casilla, entre otros elementos. También explicó que "día a día llegan ofrecimientos de la gente previendo que el corte se prolongará el verano".
La continuidad del corte, que comenzó el lunes a las 14 por tiempo indeterminado, no tiene por ahora discusión y todo indica que se extenderá. Según señaló Pouler, en la asamblea de ayer a la noche "no hubo una sola moción para levantar el corte" en la ruta que une Gualeguaychú con Fray Bentos a través del puente internacional General San Martín.
En cambio, sí aparecieron nuevas propuestas para mostrar el descontento con el rumbo del conflicto. Uno de los temas que se analizan es el de presentar una nueva denuncia ante la Ombudsman del Banco Mundial, basado en incumplimientos que ella misma señaló meses atrás, detectados en los estudios de impacto ambiental, y que quedaban pendientes de ser corregidos.