La iniciativa del diputado Bonasso (foto) será girada al Senado. El kirchnerismo advirtió que aunque "acarreará serias complicaciones a las provincias", no la vetará
La oposición en la Cámara de Diputados remontó el traspié de la semana pasada, cuando no pudo sesionar por falta de quórum, y logró completar ayer la votación del proyecto de ley de protección de los glaciares, que ahora giró al Senado.
El oficialismo mantuvo su postura de rechazo a la iniciativa, aunque el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, ratificó ayer que, en caso de que el Senado la convierta en ley, el Poder Ejecutivo no la vetará. "Acarreará serias complicaciones a las provincias. No lo compartimos. Si se vota, no se vetará. Se promulgará", escribió Fernández en su cuenta de Twitter. La decisión presidencial fue celebrada por el senador oficialista Daniel Filmus, uno de los promotores del proyecto en la Cámara alta, quien estimó que el dictamen de comisión estará listo para su debate el mes próximo.
El proyecto de protección de glaciares había sido aprobado en general por la Cámara baja el 14 del mes pasado, por 129 votos a favor contra 86 negativos. Sin embargo, cuando los diputados comenzaron a abordar la discusión en particular de cada artículo, la sesión se diluyó por falta de quórum.
El proyecto de ley de protección de glaciares, que tiene como principal impulsor a Miguel Bonasso (Diálogo por Buenos Aires), que busca preservarlos "como reservas estratégicas de recursos hídricos", genera polémica por la definición que allí se establece sobre el "ambiente periglaciar".
Según la iniciativa se considera área periglaciar aquella zona de media y baja montaña "con suelos congelados que actúa como regulador del recurso hídrico".
A juicio de muchos legisladores, sobre todo aquellos oriundos de las provincias cordilleranas, esta definición resulta demasiado amplia, por lo que podría restringir todo tipo de actividad productiva en una vasta zona.
"Este es un gran triunfo en la Cámara de Diputados. Esperemos que el Senado pueda convertirlo pronto en ley y que el Gobierno cumpla su promesa de no vetarlo", celebró Bonasso. El mensaje estaba dirigido a la Presidenta que por presión de las provincias con actividad minera había vetado esa norma anteriormente.