Los coreanos sabían que sin él, el show era distinto. Los organizadores del amistoso habían pagado por el pack completo y faltaba algo.

Pero la presión dio resultado: ante la amenaza de una multa, Guardiola decidió poner a Lio Messi en el amistoso entre el Barcelona y las estrellas del fútbol coreano. Y el argentino demostró todo lo que vale: apenas 16 minutos en cancha le bastaron para convertir dos goles. Efectivo ya.

El Barcelona anda con el cinturón ajustado por las finanzas de los últimos tiempos, por lo que una oferta de 200.000 euros no es para desaprovechar.

Así fue que Pep Guardiola dio el brazo a torcer y, pese a que no era su idea inicial, incluyó a Messi en el partido ante el Korea League, combinado de figuras de la liga asiática. Pero no sólo económicamente le rinde Lio al Barsa: el partido iba 1-2 para los blaugranas cuando ingresó y 3 a 2 cuando salió, tras un doblete suyo y clink caja.

El capitán del Barcelona fue el otro argentino del plantel, Gabriel Milito, que tuvo un partido correcto a pesar de quedar pagando en el segundo gol de los coreanos. Los otros tantos de los catalanes fueron convertidos por Ibrahimovic en el primer tiempo y por los canteranos Víctor Sánchez y Jonathan Soriano. Pero los goles más valiosos fueron los de Lionel.