Nació a las 6 del sábado, después de un trabajo de parto de 12 horas y pesó 29 kilos.La madre fue Gran Campeona en 2006 y competirá en la categoría Limangus
Nació el primer ternerito en la Rural, a las 6 del sábado después de un trabajo de parto de 12 horas.
Pesó 29 kilos, todavía no tiene nombre y serán los chicos quienes lo elegirán.
Para eso, hay una urna en el box Limangus del pabellón Amarillo, en donde están las vacas y los toros.
Cuando termine la feria, el dueño de la cabaña La Blanqueada, dueño del animal, elegirá por sorteo al ganador.
Por eso, mientras los caballos desfilaban por la pista Central y comenzaban los remates de los petisos en la Auxiliar, todos quisieron pasar por el pabellón Amarillo para bautizarlo.
“Piqui”, dijo Sofía (7) con dulzura. “Chily”, fue la elección de Camila (12). Matías (8) lo bautizó como “Tito”, igual que el ex guardaespaldas mudo de Ricardo Fort. Otros optaron por nombres de personas, como “Nicolás”, elegido por Diego (7) y Micaela (3), o “Antonio”, el nombre ideal según Thiago (8).
“La madre está nerviosa así que por hoy quedan los dos en el box”, explica Eduardo Cascallares, el cabañero que estuvo durante el parto.
“Es un animal hermoso y ojalá sea tan bueno como la madre”, dijo.
Es que “la madre” fue Gran Campeona en 2006, y este martes comenzará a competir en la categoría Limangus, una raza argentina creada a partir de la mezcla de otras dos, Limousin y Angus.