En medio de versiones periodísticas y presiones, la renovación del contrato de Juan Riquelme con Boca, que ya venció, sumó un nuevo capítulo de la novela que no tiene fin
En el programa Vamos con Niembro, el N°10 salió al cruce por una versión de que su arreglo era inminente. "Hay que decir la verdad de cómo está la situación hoy. Confunde a la gente que digan que está arreglado cuando las cosas fueron para atrás el lunes. Alguien les mandó a decir [a los periodistas] que estaba arreglado, pero hay que ser claros", disparó Riquelme, de 32 años.
"Yo quiero que esto se solucione. Si cada vez que hay una reunión aparecen más piedras y yo trato de saltarlas, no quiero que la gente se confunda. Esta situación fue para atrás", agregó Román en Radio del Plata. "Yo no sé si Boca está jugando con el tiempo y quiere llevar esto al final", fustigó.
Sobre la dilación en las negociaciones, Riquelme aclaró: "Jamás le pedí plata a Boca; no estoy hablando de dinero. Yo no les vendo el contrato... lo mío es muy fácil. La situación está igual que hace 20 días atrás. Nos ofrecieron una cosa que es para reírse. Y no hablo de plata, sino de la forma del contrato."
La última reunión entre Jorge Amor Ameal, presidente de Boca, y Daniel Bolotnicoff, representante de Román, fue el lunes. Allí no hubo acuerdo, ya que el jugador pide un contrato por cuatro temporadas.